
En la apertura de ayer, el índice Nikkei mostró una recuperación del 6%, tras caer 7,8% en la víspera, en medio del entorno de alta volatilidad. Mientras que el mercado de Londres ganó 1,27%, el de París 1,41% y el de Frankfurt 0,86%. En el caso de Wall Street, los tres principales índices estadounidenses abrieron en positivo (Dow Jones, 3,51%; Nasdaq, 3,70%; y el S&P 500, 3,30%).
Alrededor del mediodía – hora peruana – los mercados volvieron a tener un sobresalto, tras el anuncio de Trump sobre los nuevos aranceles contra el gigante asiático. Según Yahoo Finance, el S&P 500 y el Nasdaq sufrieron caídas del 0,01% y 0,25% respectivamente. Para el cierre de la jornada, Wall Street volvió a caer, pasando así de una mañana con ganancias a una tarde en rojo llena de volatilidad.
“En los últimos días hemos visto varios retrocesos, y éste ha sido (uno de) los más negativos”, declaró a la agencia AFP, Angelo Kourkafas, analista de la firma Edward Jones.
Hoy, China respondió a Trump, elevando del 34% al 84% los aranceles a importaciones estadounidenses a partir del próximo 10 de abril. El Ministerio de Finanzas del país asiático instó a EE.UU. a corregir de inmediato sus “prácticas erróneas”, cancelar todas las medidas arancelarias unilaterales y resolver adecuadamente las diferencias a través de un diálogo igualitario sobre la base del respeto mutuo.
¿Podría la economía mundial caer en recesión?
Hace algunos días, en una carta dirigida a sus inversionistas, JP Morgan -uno de los bancos más grandes de Estados Unidos- indicó que la posibilidad de una recesión global se elevó del 40% al 60%. Por su lado, el Deutsche Bank advirtió que los nuevos aranceles tendrán “enormes implicaciones globales para este 2025, así como las décadas y años venideros”.
Para Diego Macera, director del Instituto de Economía (IPE), es difícil tener en claro el escenario mientras lo estamos viviendo. “Personalmente no creo que estemos caminando necesariamente hacia una recesión en Estados Unidos y mucho menos a una recesión global. Falta mucho todavía, hay mucha incertidumbre y quizá eso es lo más peligroso de esta ecuación”, refirió.
Por su parte, Leonardo Baptista, jefe de Asesoría en Perú de Sura Investments, aseguró que todavía no vemos señales tempranas de recesión. “Lo que sí podemos afirmar es que el sentimiento del inversionista y del consumidor ha retrocedido a niveles pandémicos. Sí hay un sentimiento donde todo se puede encarecer y gastar menos podría tener una consecuencia en la cadena de ingresos de las empresas más adelante”, explicó.

¿Qué pasará con la economía de Estados Unidos?
Para Macera y Baptista, la duración y el impacto que tenga esta guerra comercial entre China y Estados Unidos determinará el daño a la economía estadounidense.
“Un arancel de 104% es excesivo y eso es lo que mantiene preocupados a los bancos. ¿Hasta qué punto las dos economías más grandes pueden tener un ataque de aranceles? Nuestra perspectiva sigue siendo esperar y mirar cómo van evolucionando los datos”, refirió Baptista de Sura Investments.
Mientras que para Macera, el mejor escenario posible – que evitaría una recesión – es que haya negociaciones ágiles, que se puedan encontrar ganancias políticas rápidas y que eviten, sobre todo, los aranceles recíprocos. En cambio, el peor escenario es que más bien haya un escalamiento violento de los aranceles.
“Yo esperaría que en algún momento haya cabeza fría de algún lado. En 1987 tuvimos un escenario algo similar y eventualmente las cabezas frías prevalecieron, esa es la mejor ‘chance’ que hay para que se solucione rápido (esta situación)”, añadió.

¿Y la economía peruana?
“Cuando Estados Unidos estornuda, América Latina se resfría”. Esta frase se acuñó como consecuencia de la Gran Depresión de octubre del 1929, cuando cayó estrepitosamente la bolsa de Nueva York, ¿hoy será ajena a la realidad de los aranceles?
Para Macera, si hubiera una profundización de la crisis y por ende, un efecto en el sector más importante para el Perú, las exportaciones no tradicionales, los productos peruanos se verían afectados. “Un menor consumo en Estados Unidos y además con los aranceles impuestos del 10% que ya tenemos, nos afectará. Espero que eso se vaya corrigiendo la siguiente semana poco a poco”, añadió.
Tanto Macera como Baptista esperan que la próxima semana haya algo de alivio y los mercados, así como los líderes de las grandes economías logren un nuevo arreglo, porque los propios consumidores norteamericanos serán los más afectados.
