La agencia Reuters informó el mes pasado que Estados Unidos ordenó desplegar 10 cazas F‑35 en Puerto Rico como parte de sus operaciones en el Caribe. Hasta el momento se ha confirmado que al menos cinco de esos aviones ya están en la antigua base Roosevelt Roads, en Ceiba.
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El pasado viernes, el Comando Sur de Estados Unidos publicó un video en la red social X (antes Twitter) con las primeras imágenes de los F‑35 desplegados en Puerto Rico.
En ese video se ve al personal de tierra cargando armamento en al menos uno de los F‑35.
Específicamente, se observan dos misiles aire-aire, uno de ellos del tipo AIM‑9X Sidewinder.
También se ve un misil aire-aire de medio alcance AIM‑120 AMRAAM.
Además, una bomba guiada del tipo BLU‑111 C/B de 500 libras (226 kilos) equipada con sistema JDAM (que la convierte en un arma guiada).

De acuerdo con los especialistas, esa configuración armamentística sugiere que los F‑35 apostados en Puerto Rico no solo estarían para interceptación aérea, sino que también han sido dotados de capacidad de ataque a tierra.
En el video de 47 segundos, el Comando Sur una la frase usada “Letalidad y combate”.
“Los Marines cargan munición en los cazas F-35B Lightning II del cuerpo de Marines durante un entrenamiento en el Caribe. Las fuerzas estadounidenses están desplegadas en el Caribe para apoyar la misión del Comando Sur, las operaciones dirigidas por el Departamento de Defensa y las prioridades del presidente de Estados Unidos”, señala la publicación.
El poder de los cazas F-35

El caza F-35 Lightning II, fabricado por la empresa estadounidense Lockheed Martin, es un caza de quinta generación que combina capacidades furtivas, sensores avanzados, conectividad digital y poder de fuego en una sola plataforma.
Su diseño angular, su revestimiento especial y su capacidad de ocultarse del radar lo convierten en una herramienta de ataque altamente sigilosa, ideal para penetrar defensas enemigas sin ser detectado.
Su principal ventaja no está solo en el sigilo. El F-35 actúa como un verdadero “centro de comando volador”: fusiona datos de múltiples sensores —propios y de otras unidades— y los entrega al piloto en tiempo real, permitiéndole tomar decisiones con un nivel de conciencia situacional sin precedentes, de acuerdo con el fabricante.
“Un F-35 puede ver antes de ser visto, disparar antes de ser detectado, y salir sin dejar rastro”, según el Pentágono.

Existen tres variantes del F-35:
- F-35A: convencional (despegue y aterrizaje estándar).
- F-35B: de despegue corto y aterrizaje vertical (STOVL).
- F-35C: para portaaviones (catapultado).
Principales eEspecificaciones técnicas:
- Velocidad máxima: Mach 1.6 (1.930 km/h).
- Autonomía: 2.200 km sin repostar. Alcance de combate: 1.100 km.
- Altura de vuelo: Más de 15.000 metros.
- Sensores avanzados: sistemas de fusión de datos, cámaras infrarrojas, radares de alerta.
- Capacidad de guerra electrónica: interferencia, detección, ciberataques limitados.
- Sistema de visor montado en el casco (HMDS): el piloto puede ver “a través del avión”.
- Conectividad: enlace de datos seguro con otras unidades aéreas, terrestres y navales.
En cuanto a su costo, los F-35A, que son la versión convencional, cuestan alrededor de 80 millones de dólares por unidad. El F-35B cuesta entre 100 y 110 millones de dólares y el F-35C unos 100 millones de dólares.
Estos precios no incluyen mantenimiento, entrenamiento, logística ni armamento.
El costo de operar un F-35 durante toda su vida útil puede superar los 150 millones de dólares por unidad.
Estados Unidos no es el único país que opera los F-35. Más de 17 naciones ya cuentan con unidades en servicio o en proceso de adquisición. Entre ellas se encuentran aliados estratégicos como el Reino Unido, Italia, Australia, Japón, Israel y Noruega.
Israel opera una versión modificada conocida como F-35I “Adir”, adaptada a sus necesidades específicas.
Maduro en la mira

Andrés Gómez de la Torre, especialista en temas de defensa e inteligencia, dijo a El Comercio que el despliegue de cazas F-35 en Puerto Rico tiene un doble propósito: militar y disuasorio.
Explicó que estos aviones, utilizados por Israel en operaciones recientes contra Hamás, los hutíes y Hezbolá, son conocidos por su capacidad para realizar ataques “quirúrgicos” de alta precisión contra blancos de alto valor, minimizando daños colaterales.
“En el caso de Venezuela, los escenarios son claros. Se está jugando actualmente a una táctica de máxima presión para ver si cae el régimen de Maduro, aunque es complicado porque hay varios vectores de poder en ese país, y porque su caída no necesariamente garantiza el fin del régimen chavista», remarcó.
Sostuvo que la justificación del combate al narcotráfico para este despliegue es un escalón a partir del cual “evidentemente, está como trasfondo la eliminación de un régimen chavista, madurista y eventualmente de todos sus nexos o de toda su estructura”.
En este punto, cabe recordar que el jueves el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, denunció denunció que se había detectado a cinco aviones de combate de EE.UU. volando a 75 kilómetros de la costa venezolana.
“Nunca habíamos visto este despliegue de aviones, que sabemos que están estacionados en Puerto Rico, de la clase F-35”, dijo Padrino.












