La bolsa de Nueva York abrió a la baja el martes, en un clima de moderación ante una serie de indicadores que darán una imagen del estado de salud de la economía estadounidense.
En las primeras operaciones, el índice Dow Jones perdió un 0,21%; el tecnológico Nasdaq, un 0,16%; y el índice ampliado S&P 500, un 0,13%. Respecto al cierre del lunes 30 de septiembre, la bolsa de Nueva York terminó al alza.
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“Fue un gran trimestre”, resumió Steve Sosnick, de Interactive Brokers, para quien “es difícil identificar un perdedor”. En tres meses, el Dow Jones ganó 8,2% y el S&P 500 5,5%. “Lo interesante”, señala Sosnick, “es que al que le fue menos bien es al Nasdaq”, con ganancias de 2,6%.
Es un escenario distinto al habitual desde hace un año y medio, cuando el mercado se veía impulsado por una única locomotora: la inteligencia artificial. “Hubo una verdadera rotación” de carteras, destaca Sosnick, y los inversores buscaron otros sectores y valores antes menospreciados.
Pero los cambios no afectaron realmente al sector tecnológico, puesto que ingresó dinero al mercado accionario, explicó el analista. Este lunes, sin embargo, la plaza neoyorquina estuvo la mayor parte del tiempo en rojo y solo pasó al terreno positivo minutos antes del cierre.
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Entre los valores del día, destacaron Apple (+2,29%), Citigroup (+1,18%), los supermercados Costco (+1,36%) y FedEx (+2,29%), impulsados por compras a buen precio. Chevron (+1,22%) subió tras el visto bueno de las autoridades de la competencia a la compra de su rival Hess.
La telefónica AT&T ganó 0,46% tras anunciar que cede su participación de 70% en el capital de DirecTV por 7.600 millones de dólares a la firma de inversiones TPG. DirecTV tomará el control de Dish, el otro polo del mercado de televisión satelital en Estados Unidos.