¿Reelección indefinida de Bukele a la vista?: El Congreso de El Salvador facilita la reforma de la Constitución

Los diputados salientes aprovecharon la última sesión plenaria para hacer la reforma, que permitirá a la legislatura entrante poder de cambiar la Constitución de manera expedita.

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Los nuevos diputados que comenzarán su mandato este 1 de mayo solo deben ratificar la reforma al artículo 248 de la Constitución para que esta entre en vigencia.

Cuando eso ocurra, explicó el portal El Faro, cualquier cambio a la Constitución podrá aprobarse de inmediato y sin la necesidad, como había sido hasta ahora, de esperar a que una nueva legislatura entrara en funciones y lo ratificara.

La reforma fue aprobada sin estudio ni análisis previo con el respaldo de 66 votos del oficialismo y obtuvo 16 votos en contra.

El artículo reformado, el 248, es uno de los más importantes de la Constitución de El Salvador y establece que la única forma de modificar la Carta Magna es la aprobación en una legislatura por la mitad más uno de los diputados y luego —con una elección popular de por medio— que una segunda legislatura ratifique los cambios con al menos dos tercios de los diputados electos.

Ahora, el nuevo inciso agregado al artículo 248 establece que una reforma se puede aprobar y ratificar dentro de una misma legislatura, “con el voto de las tres cuartas partes de los diputados electos”, con lo que podrá ser publicada en el Diario Oficial y entrar en vigor de inmediato.

La Constitución de El Salvador establece que los diputados son elegidos para un período de tres años, con oportunidad de reelección inmediata.

La Asamblea Legislativa saliente está integrada por 84 diputados. Para la nueva legislatura que se inicia este 1 de mayo se redujo la cantidad de diputados a 60: 54 escaños serán para el oficialista Nuevas Ideas, tres para sus aliados y solo tres opositores.

El Faro explicó que según la jurisprudencia de la Sala de lo Constitucional, era obligatorio que los candidatos a diputados que pretendieran hacer lo que los bukelistas han hecho promocionaran las reformas constitucionales en juego para que la población tuviera la potestad de elegir si querían esos cambios.

Eso obligaba a que, bajo las reglas que los diputados han pasado por alto, primero unos candidatos promocionaran sus intenciones reformistas de la Constitución, luego ganaran electoralmente la mayoría para hacerlas durante su periodo y esperaran a que la siguiente legislatura las ratificara para que entraran en vigencia. Nada de eso pasó.

“Esta Asamblea ya no podía aprobar ningún acuerdo de reforma a la Constitución”, dijo a El Faro Gabriela Santos, abogada y directora del Instituto de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana (Idhuca), en alusión a las sentencias de la Sala de lo Constitucional que prohibió la aprobación de cambios constitucionales en los días previos a la asunción de una nueva legislatura.

“La Asamblea Legislativa adquiere superpoderes”

Para Eduardo Escobar, director de Acción Ciudadana, una organización de la sociedad civil que promueve la transparencia en la gestión pública, con esta reforma “la Asamblea Legislativa adquiere superpoderes, pues una legislatura ordinaria se convierte prácticamente en una Asamblea Constituyente que puede alterar la Constitución de inmediato, sin ningún proceso previo, sin debate, discusión, sin ningún control”.

“Esto deja en vilo el alcance y el ejercicio de los derechos ciudadanos. Ellos pueden fácilmente reformar los derechos, cambiar los límites al ejercicio del poder político; es decir, pueden involucrarse más en la vida personal, privada de las personas, alterar el ejercicio del derecho de comunidad dándoles más poder a determinadas instituciones. Esos son algunos de los riesgos que implica la reforma”, dijo Escobar en diálogo con El Comercio.

En cuanto a lo que estaría en la agenda del oficialismo, Escobar refirió que todavía no han mencionado públicamente qué cambios quieren hacer en la Constitución, “pero con esta reforma ya se les abrió el camino para que puedan hacer cualquier cosa. Ya no hay un límite a lo que pueda hacer la Asamblea Legislativa”, enfatizó.

Sobre la posible relección indefinida del presidente Bukele, Escobar sostuvo que tampoco se ha mencionado de manera oficial, pero recordó que en el pasado, cuando se preguntó a los diputados del oficialismo si harán una reforma de la Constitución, estos dijeron que no. Y cuando se les preguntó si Bukele iba a postular de nuevo, estos también dijeron que no.

En este punto, cabe precisar que el presidente de El Salvador es elegido para un período de cinco años y la Constitución prohíbe la reelección inmediata. Sin embargo, Bukele pudo postular de nuevo y ganó; ¿cómo lo hizo?

El artículo 154 de la Constitución de El Salvador dice: “El período presidencial será de cinco años y comenzará y terminará el día primero de junio, sin que la persona que haya ejercido la Presidencia pueda continuar en sus funciones ni un día más”.

Pero en mayo del 2021, con la colaboración de la Asamblea Legislativa, donde el partido de Bukele tenía mayoría, el mandatario expulsó a cinco jueces de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, el máximo órgano judicial del país.

Meses después, la Sala de lo Constitucional, con mayoría de jueces aliados de Bukele, emitió una resolución que autorizaba la reelección inmediata del presidente.

En su fallo, la sala ordenó al Tribunal Supremo Electoral permitir “que una persona que ejerza la Presidencia de El Salvador y no haya sido presidente en el período inmediato anterior participe en la contienda electoral por una segunda ocasión”.

Solo exigía que Bukele deje su cargo seis meses antes de que comenzara un nuevo periodo presidencial.

Las posibles reformas en agenda

¿Qué reformas se podrían estar preparando? De acuerdo con El Faro, el youtuber y exmagistrado del Tribunal Supremo Electoral Walter Araujo, ha comenzado a esparcir rumores sobre la inminencia de las reformas constitucionales.

Araujo, que intentó ser candidato a diputado del partido de Bukele, mencionó una lista de lo que, a su juicio, deben ser las reformas imprescindibles, entre ellas la reelección indefinida del presidente: “Hay que regular, de una vez por todas, el tema de la reelección presidencial, iniciar un nuevo ciclo de ejercicio de la Presidencia y dejarlo plasmado con toda claridad: 1, 2, 3 o hasta que la gente quiera”.

También habló de que había que extender el plazo de funciones de diputados y alcaldes, eliminar el financiamiento a los partidos políticos para campaña electoral, legalizar las candidaturas independientes y transformar el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Los diputados del partido oficial Nuevas Ideas no han informado sobre las razones de fondo detrás de la reforma.

Solo han dicho en el documento que se busca “tener las herramientas necesarias para enfrentar las realidades sociales que demandan los salvadoreños ante los cambios constantes que el mundo enfrenta de manera veloz”. y que la reforma serviría para enfrentar “cualquier evento que requiera la protección reforzada de la Constitución a los derechos fundamentales”.

Por el lado de la oposición, la diputada Claudia Ortiz, del partido VAMOS, criticó a los oficialistas y los acusó de estarse “autorrecetando poder” y de “quitarle cualquier límite al poder”.

“Debería darles vergüenza porque esto constituye una traición al pueblo… Nos rige el antojo y capricho de un grupo que está en el poder”, agregó Ortiz.

También acusó al oficialismo de ajustar la cantidad de votos necesarios para ratificar las reformas constitucionales al resultado obtenido en las elecciones de inicios de marzo de este año.

“¿Qué pasa si en unos días después del primero de mayo o el mismo primero de mayo estos diputados deciden aumentarse el período legislativo de tres a cinco años? Lo van a poder hacer”, advirtió Ortiz.

El diputado Reynaldo Cardoza, de Concertación Nacional, partido aliado de Bukele, respondió a Ortiz.

“Por supuesto que se pueden alargar los períodos electorales (legislativos) siempre y cuando sea en bienestar del pueblo salvadoreño”, dijo Cardoza.

De acuerdo con Cardoza, es pesado y costoso para los ciudadanos asistir a votaciones cada tres años para elegir a los diputados.

La diputada opositora Marcela Villatoro, del partido ARENA, lamentó que “Nuevas Ideas haga todo en forma inconsulta, imponiendo su agenda, sin importarles que atentan contra la seguridad jurídica, pues van modificando leyes a su antojo”.

“No le estamos quitando nada a la Constitución, lo que estamos haciendo es adaptándola a los cambios que demanda la nueva realidad”, justificó Christian Guevara, jefe de la bancada de Nuevas Ideas.