En mayo, el pleno del Congreso aprobó la primera votación de la reforma que significa dos cambios significativos para la política subnacional: la restitución de la reelección de alcaldes y gobernadores, y la eliminación de los movimientos regionales.
La fórmula recibió 92 votos a favor -superando los 87 requeridos- pero al tratarse de una reforma constitucional, debía ser ratificada en una segunda votación en la siguiente legislatura. Han pasado casi tres meses de la segunda legislatura, y el tema aún no ha sido visto en sesión plenaria.
El pleno incluyó el tema en su agenda para el jueves 22 de agosto, pero nunca se llegó a debatir. A través del Área de Comunicaciones, este Diario consultó al presidente del Congreso, Eduardo Salhuana, sobre la fecha de debate y la respuesta fue: “no hay fecha definida”.
Cuando consultamos sobre los motivos de dicha indefinición, se añadió: “no hay consenso para la votación”. Es decir, no están asegurados los 87 votos.
Es por la falta de votos que el tema no ha vuelto a tocarse en la Junta de Portavoces.
Cambio de posturas
A lo largo de las últimas semanas, las posturas de las bancadas han ido variando y jugando un papel clave en la indefinición. Primero tenemos a Renovación Popular, la bancada cuyo líder Rafael López Aliaga había anunciado su postura en contra de la eliminación de los movimientos regionales. Dado a que esta propuesta (la eliminación de los movimientos regionales) está amarrada con la reelección, se entendía que el partido celeste votaría en contra de la ratificación de la reforma constitucional.
En mayo, Renovación Popular había brindado dos adhesiones en la primera votación. Hoy su postura es más relevante dado a que cuentan con 10 votos en votos. Consultada al respecto, la legisladora Norma Yarrow anunció que la postura cambió a favor de la propuesta. “Renovación Popular inicialmente dudó lo de los movimientos pero, después de un análisis, vimos por conveniente apoyar la eliminación de estos. Necesitamos fortalecer partidos políticos y bases a nivel nacional. Y la reelección de alcaldes totalmente de acuerdo por un periodo”, dijo a El Comercio.
Con esto se entiende, que los 10 votos de Renovación Popular estarían dados para la segunda votación. Sin embargo, estos no son suficiente para llegar a las 87 adhesiones requeridas.
Acción Popular también cuenta con 10 votos, y mantiene su postura en contra. “Nuestra posición sigue siendo en contra de la reelección automática. Hasta el momento esa es la posición del partido y mayoritaria en la bancada”, refirió Julio Chávez, presidente de Acción Popular, a este Diario.
Según el líder de lampa, su bancada impulsará que la reelección y eliminación de movimientos regionales se implemente a partir del 2027, y no para la próxima elección subnacional 2026.
Diversas fuentes legislativas coincidieron en alegar que Podemos -al igual que Acción Popular- tampoco apoyará la segunda votación de la reelección subnacional. En mayo, Podemos brindó ocho votos a favor y apenas uno en contra. A la fecha, dicho grupo cuenta con 13 votos claves. Aunque este Diario consultó con José Luna, secretario general de Podemos, quien sostuvo que sí apoyarían la norma.
Pese a lo dicho por Luna, en el Congreso no consideran los votos de Acción Popular y Podemos, con lo cual el apoyo a la reelección se quedaría con 76 votos, faltándole 11 adhesiones para llegar a los 87 requeridos. El gran problema es que no hay de dónde sacar esos 11 votos faltantes. Incluso si Podemos cumpliera lo que dice Luna, la postura contraria de AP mantiene en vilo las sumas a favor de la fórmula.
La mayoría de las fuentes consultadas coincidieron en señalar que se ha perdido apoyo a la fórmula, debido a que consideran que los únicos beneficiados serían Alianza para el Progreso (APP) y Somos Perú, los partidos con más autoridades subnacionales a la fecha, especialmente en regiones.
Varios partidos ya han empezado a mover sus fichas electorales pensando en que no habrá reelección: los alcaldes postularían como tenientes alcaldes o postularían a familiares para la sucesión.
