El pasado 3 de octubre pasado, Francisco Tapia, secretario general del municipio de Chilpancingo, en el estado mexicano de Guerrero, fue asesinado a balazos mientras caminaba por el centro histórico de la ciudad. Al día siguiente, un consternado alcalde Alejandro Arcos Catalán dio declaraciones al canal del periodista Ciro Gómez Leyva y dijo que su seguridad debería ser reforzada. Esa seguridad nunca llegó. La noche del domingo, el cuerpo del burgomaestre fue encontrado abandonado en una camioneta blanca. Sus asesinos lo decapitaron y colocaron su cabeza en el techo del vehículo, al más puro estilo de las ejecuciones que perpetra el crimen organizado. Había estado en el cargo solo seis días.
El 28 de setiembre también asesinaron a quien se perfilaba como su secretario de Seguridad Pública, Ulises Hernández Martínez. Un comando armado disparó contra su vehículo en la carretera a Tixtla. El hombre y su acompañante, una mujer de 35 años, murieron acribillados.
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Ninguna persona ha sido detenida por estos tres crímenes.
“A Francisco Gonzalo Tapia Gutiérrez siempre lo conocimos como un hombre honrado, de valores, de convicciones, se había dedicado siempre al servicio de la comunidad y no tenía ningún problema en su vida, ni familiar, ni personal que nosotros supiéramos”, dijo Arcos en la entrevista.
Luego se le preguntó si la seguridad en el municipio debía reforzarse. “Desde luego que sí. Lo pido y la de mi equipo de trabajo. Nosotros vamos a seguir trabajando, vamos a seguir luchando por nuestra comunidad. Siempre hemos hablado de un proyecto de paz, ha sido nuestra bandera, nuestra propuesta y eso es a lo que aspiramos. No somos gente de conflicto”, manifestó.
También pidió el respaldo de la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y de la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado.
“Le pido a la presidenta Claudia Sheinbaum que caminemos juntos de la mano, les pedimos respaldo, apoyo. Los necesitamos, los necesitamos para poder salir adelante. Les pido con el corazón en la mano, ayúdenme a luchar y construir la paz que necesitamos”, dijo.
Derrotó a Morena
Alejandro Arcos Catalán, de 43 años, ganó las elecciones del 2 de junio por la coalición Fuerza y Corazón por México, formada por el Partido Acción Nacional (PAN), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD). Juró como alcalde de la capital de Guerrero el pasado 30 de setiembre.
Arcos había anunciado un plan de seguridad llamado “Blindaje Chilpancingo”, que consistía en contratar a más policías, adquirir más patrullas y fortalecer los sistemas de denuncia e investigación.
Guerrero es uno de los estados más violentos de México. Bandas criminales como el Cártel del Sur, Los Tlacos, La Bandera, La Familia Michoacana, el Cártel Jalisco Nueva Generación, Tequileros, Cárteles Unidos, Los Viagras, Los Rusos, Los Ardillos, entre otras, extorsionan a las industrias legales, al transporte público, a todo tipo de negocios y hasta a los mercados. También se dedican al tráfico de drogas.
En julio del año pasado se divulgó un video donde aparece la alcaldesa saliente, Norma Otilia Hernández, reunida con el líder de Los Ardillos, Celso Ortega. La autoridad terminó siendo expulsada de su partido, el gobernante Morena.
De acuerdo con el diario El País, es público el interés de Ortega y su grupo con la política. Uno de sus hermanos, Bernardo, fue un peso pesado del PRD local. En una entrevista que dio este año, Celso Ortega dijo que la reunión con la exalcaldesa respondía a una negociación en curso. También manifestó que Los Ardillos le habían apoyado para llegar a la alcaldía.
Al menos 17 candidatos y políticos de Guerrero fueron asesinados
durante la campaña para las elecciones de junio, de acuerdo con la consultora Laboratorio Electoral. Solo Chiapas, con 26, tuvo más homicidios políticos. Mientras que durante los 6 años de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador al menos 20 alcaldes y 70 diputados municipales fueron asesinados.
Las últimas actividades del alcalde Arcos
Antes de su asesinato, el alcalde Arcos había visitado zonas afectadas por las intensas lluvias que cayeron en días pasados a consecuencia del paso del huracán John.
También realizó seis publicaciones en su cuenta de Facebook donde informaba sobre el estado de las carreteras, el encauzamiento del río Huacapa y los daños dejados por el huracán John.
Según Infobae, su última visita fue a la comunidad de Tepechicotlán, territorio donde se ha reportado una fuerte presencia de Los Ardillos.
Ahí, el alcalde supervisó una brigada especial para brindar apoyo a las familias afectadas por el huracán. “Seguiremos en coordinación para atender las afectaciones en el panteón y preparando una campaña de limpieza masiva para prevenir riesgos sanitarios”, informó Arcos poco antes de las 17:00 horas del domingo.
A las 20:54, el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, informó que Alejandro Arcos había sido asesinado, sin dar más detalles.
El carro donde fue encontrado el alcalde estaba estacionado afuera de un hotel cerca de la carretera entre Chilpancingo y Tixtla, en la colonia Villas del Roble.
Antes de que se confirmara el asesinato, en redes sociales circularon fotos del crimen. En una de ellas se muestra el cuerpo del alcalde decapitado al interior de una camioneta. Permanecía en el asiento del copiloto y su pecho estaba cubierto por una sábana gris.
En otra foto se ve la cabeza cercenada del alcalde que fue colocada en el techo del carro.
El martes, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de México, Omar García Harfuch, dijo que el domingo 6 de octubre Arcos Catalán tenía pactada una reunión en Petaquillas, una localidad ubicada en Chilpancingo. Manifestó que no se sabe el motivo de la cita ni quiénes iban a participar. El acalde estaba solo y no contaba con escoltas de seguridad ni chofer.
“Se pierde comunicación en una comunidad y, posteriormente, se realiza el hallazgo del cuerpo sin vida del alcalde”, lamentó.
García Harfuch precisó que Arcos no contaba con protección de la Guardia Nacional debido a que no había realizado ninguna petición formal para ello.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quien también asumió el cargo el 1 de octubre, dijo el lunes que las autoridades están investigando el crimen.
Alejandro Arcos Catalán era licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública. En 1994 trabajó como gestor de grupos vulnerables y cinco años más tarde participó en el gobierno estatal de Guerrero, donde se desempeñó como coordinador de eventos juveniles.
En 2005 el fundó la Asociación Civil Muévete por Guerrero y en el 2009 asumió la dirección de Catastro en el Ayuntamiento de Chilpancingo.
En el 2011 fue director general del Instituto Guerrerense para la Atención Integral de las Personas Adultas Mayores (IGATIPAM).
En el 2013 fue electo diputado local en representación de Chilpancingo.
