Irán responderá a Israel. De acuerdo con la prensa de Estados Unidos, la República Islámica está preparando un ataque contra su enemigo número uno en el que utilizará ojivas más poderosas y “otras armas avanzadas” no empleadas en sus dos bombardeos anteriores ocurridos en abril y octubre de este año.
El pasado 13 de abril, Irán atacó por primera vez directamente a Israel. Ese día, disparó unos 300 misiles de varios tipos y drones. La mayoría fueron derribados por los sistemas de defensa israelíes, con la ayuda de las fuerzas armadas de Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Jordania. El ataque fue en represalia por un bombardeo israelí contra un complejo de la embajada iraní en Siria, en el que murieron varios comandantes del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI).
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Cinco días después, Israel respondió con un ataque “limitado” contra un sistema de defensa antimisiles en la región iraní de Isfahán, cerca de su principal centro nuclear.
El 1 de octubre, Irán lanzó 200 misiles balísticos contra Israel en respuesta a la muerte del líder político de Hamás, Ismael Haniyeh, asesinado en Teherán; el asesinato del líder de Hezbolá Hassan Nasrallah; y la eliminación del general de brigada Abbas Nilforoushan, un funcionario de alta jerarquía iraní.
La represalia israelí se hizo esperar hasta el 26 de octubre, cuando aviones de combate y otros medios atacaron objetivos relacionados con el sistema de defensa de Irán y bases militares que trabajan en perfeccionar sus sistemas de misiles balísticos.
Ahora Irán estaría preparando la respuesta. El diario estadounidense “The Wall Street Journal” aseguró que funcionarios iraníes y árabes que están informados sobre los planes le dijeron que Teherán advirtió en privado a Egipto que su respuesta a Israel será “fuerte y compleja”.
Además, un funcionario iraní manifestó que debido a que su ejército perdió cuatro soldados y un civil en la represalia israelí, es necesario responder. Agregó que su país ya ha emitido advertencias a diplomáticos árabes sobre el inminente ataque.
El WSJ informó que sus fuentes afirmaron que el ataque podría utilizar territorio iraquí para lanzar proyectiles y que Irán volvería a apuntar a las instalaciones militares israelíes, “pero mucho más agresivamente que la última vez”.
El inminente ataque no se limitaría solo al uso de misiles balísticos y drones explosivos, agregaron las fuentes.
El informe del WSJ dice que el ejército de Irán estará involucrado en la operación, lo que marca un cambio con respecto a los ataques de abril y octubre, que fueron llevados a cabo por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica.
¿Cuándo ocurrirá el ataque? Los funcionarios iraníes consultados por el WSJ dijeron que la represalia será después de las elecciones en Estados Unidos del 5 de noviembre, pero antes de la investidura en enero.
A fines de octubre, Estados Unidos reforzó su poderío militar en el Medio Oriente, con el envío de bombarderos pesados B-52, un escuadrón de aviones de combate, aviones cisterna y destructores de la Armada.
Además, Estados Unidos ha advertido a Irán que habría “severas consecuencias” si ataca a Israel o a Estados Unidos, y ha pedido que se ponga fin al intercambio de represalias para evitar que toda la región caiga en una guerra.
“Israel desnudó las debilidades de Irán”
Andrés Gómez de la Torre, especialista en temas de Defensa e Inteligencia, considera que hay una gran diferencia militar muy favorable a Israel.
Agregó que en los últimos meses, Irán ha estado intentando cerrar un acuerdo con Rusia para la compra de dos escuadrones de cazabombarderos Sukhoi Su-35 como una manera de equiparar su viejo arsenal que proviene increíblemente de manufactura norteamericana desde los tiempos del Sha de Irán, que fue derrocado en 1979.
“Irán tiene una Fuerza Aérea muy antigua y con algunos aviones de la era ex soviética comprados a fines de los 80 e inicios de los 90, pero que ya están bastante desfasados en relación con las tecnologías actuales”, dijo Gómez de la Torre a El Comercio.
“Los ataques aéreos realizados por Israel recientemente han demostrado que pudo debilitar y penetrar la capa de defensa antiaérea iraní, que se suponía estaba mejor preparada por los sistemas de misiles SAM S-300 que había adquirido de la Federación Rusa”, enfatizó Gómez de la Torre.
En consecuencia, dijo el especialista, “Irán debe asumir como propia una gran debilidad en materia no solo de aviones de combate, sino de sistema de defensa antiaérea”.
“Entonces, cualquier respuesta al ataque perpetrado por la Fuerza Aérea israelí puede tener consecuencias mucho más graves, porque en este último ataque Israel ha golpeado estrictamente objetivos militares y ha evitado lo que EE.UU. le había sugerido, no atacar instalaciones petrolíferas y centrales nucleares. De tal manera que Irán debe pensar muy bien cómo responder, o eventualmente no responder”, indicó.
Para Gómez de la Torre, “si el régimen de Teherán realmente tiene una adecuada percepción de inteligencia y de estrategia, debería proseguir en lo que más sabe hacer y más eficientemente conoce: las guerras indirectas con apoyo a sus proxys en la región del Medio Oriente”.
