Decenas de padres de familia se encuentran desesperados porque el año escolar está a punto de iniciar y las instalaciones del colegio Pedro Ruiz Gallo están deplorables y representan un gran peligro para los alumnos de primaria y secundaria que harán uso de este establecimiento.
Las madres denuncian que no hay carpetas suficientes ni techo en algunas áreas para los 1200 estudiantes matriculados, quienes retornarán el próximo lunes 17 de marzo. La institución, que está ubicada en el límite entre Carabayllo y Puente Piedra, tampoco cuenta con aulas adecuadas, ya que la mayoría de estas son de material prefabricado, donde el calor se concentra, en especial en esta temporada de verano.
Parte de la institución educativa fue demolida para la construcción de instalaciones más modernas y acorde a las necesidades de los jóvenes; sin embargo, el director que realizaba las gestiones falleció durante la pandemia y, desde entonces, no se han reportado avances.
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“El director hizo que tumben todo y salió una resolución para que construyan el colegio, pero el director murió con el COVID-19 y todo se quedó en nada”, relató una preocupada progenitora a Buenos Días Perú.
Los padres hicieron un llamado a la UGEL y al Ministerio de Educación (Minedu) para que cumplan con sus promesas. Hace poco indicaron que regresarían con mobiliario escolar nuevo; sin embargo, hasta ahora no es una realidad.
La institución educativa tiene 50 años de antigüedad. Al respecto, el sector liderado por Morgan Quero no se ha pronunciado sobre el estado de este colegio.
