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Además, el Ministerio del Ambiente informó que evalúa declarar en emergencia ambiental el área marina costera de Talara tras el derrame de petróleo. Por su parte, el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) dictó plazos de obligatorio cumplimiento a Petroperú para contener el derrame.
La petrolera estatal ha señalado que ya culminó las labores de limpieza de la playa Las Capullanas y que las aguas del mar de Lobitos y lugares adyacentes “ya están cristalinas”, lo que ha sido considerado por muchos especialistas como un intento de minimizar el impacto del derrame de petróleo.
La Fiscalía Provincial Especializada en Materia Ambiental de Sullana ya abrió una investigación preliminar contra la petrolera estatal por la presunta comisión del delito de contaminación del ambiente.
Posiblemente se tarden muchos años en poder recuperar zonas afectadas por derrame de petróleo, advierte especialista
Antony Apeño, biólogo marino y especialista de ecosistemas marino-costeros y biodiversidad en la ONG CooperAcción, detalló a El Comercio que las especies afectadas por el derrame de petróleo en Lobitos, Piura, ha afectado a los mamíferos marinos, entre ellos delfines y lobos, y crustáceos, entre ellos invertebrados como cangrejos de distintas especies.
El especialista señaló que otra de las especies en la que se ha registrado gran mortandad es el percebe, un crustáceo que abunda en la zona y que se asienta en las rocas.
Apeño remarcó que no es posible establecer un plazo de remediación del área contaminada por el derrame de petróleo debido a que, hasta el momento, Petroperú no ha informado de la cantidad de barriles de hidrocarburos que se vertieron al mar.
“Para poder dar un dato sobre la etapa de remediación primero hay que primero conocer, por ejemplo, de cuánto hidrocarburo se ha demarrado, dato que todavía no ha proporcionado la empresa, que lo único que dice es que se están realizando las investigaciones, sin embargo, no se sabe por qué se produjo este evento y no se sabe cuánto se ha demarrado”, expresó.
“No se puede dar una estimación exacta de cuánto tiempo se va a terminar de recuperar estos ecosistemas o una adecuación para poder disminuir estos impactos sin que tengan esos datos (de la cantidad de barriles de petróleo derramados al mar)”, agregó.
No obstante, el biólogo marino consideró que “sí se tardará muchos años en poder recuperar” las áreas marinas afectadas por el derrame, tal como viene ocurriendo en Ventanilla con la refinería de La Pampilla, operada por Repsol.
En ese contexto, cuestionó que Petroperú afirme que ya avanzado con la limpieza de gran parte de la zona afactada, pues enfatizó que el petróleo tiene a expandirse por las mareas y corrientes marinas. Incluso, alertó que podría llegar a la Reserva Nacional Mar Tropical de Grau.
“Realmente eso nos ha causado el mayor asombro, entendiendo que ese hidrocarburo no permanece solamente en el lugar donde se derrama o se produce la fuga, sino que se va expandiendo a través de las mareas y corrientes que hay en esa zona. El hidrocarburo ya está llegando incluso a Cabo Blanco. Los últimos reportes nos muestran presencia de hidrocarburo en una playa llamada Peña Negra, que está muy cerca de Cabo Blanco”, manifestó.
“Un evento como este no es fácil de poder controlar en primera instancia, y más si no tienes los planes de contingencia adecuados o si no lo aplicas de forma adecuada”, agregó.
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“Están bastante preocupados (los pescadores) porque al llegar a esta zona de Peña Negra, que está cerca de Cabo Blanco, está prácticamente a un paso de llegar a uno de los polígonos de esta área protegida del mar de Grau, que recién se ha declarado, y eso les genera preocupación porque se supone que es una zona que no debe recibir ningún tipo de impacto”, señaló.
Apeño indicó que los sectores más afectados por el derrame son los pescadores artesanales, los que comercializan productos marinos, así como los operadores de turismo, que agrupa a agencias de turismo, hoteles y restaurantes. El hecho genera un doble impacto debido a que ocurrió en una fecha de gran concurrencia de turistas a las playas.
No se puede establecer plan de remediación sin conocer cantidad de barriles vertidos al mar, señala experto
Los principales perjudicados en el plano social y económico con el derrame de petróleo en Lobitos son los operadores locales de restaurantes, hospedajes, transporte local y pescadores. Tambien especies y animales como el pulpo, el percebe, los delfines, las tortugas, los caballitos de mar y cangrejo han sido afectados por el derrame, indicó Juan Carlos Sueiro, director de Pesquerías de la organización Oceana Perú.
Al igual que Antony Apeño, el especialista afirmó que no se puede determinar en qué tiempo se ejecutará un plan de remediación en la zona debido a que no se conoce la cantidad de hidrocarburo que ha caído al mar durante las actividades de la refinería de Talara.
Incluso, remarcó que tampoco se han informado qué tipo de combustible es el que se ha vertido al mar, ya sea pesado, mediano o liviano. Consideró que también se debe tomar en cuenta las corrientes marinas y las estructuras físicas en las que se asienta el petróleo.
“Primero, y que no conocemos con certeza, cuánto es el volumen de lo que se ha vertido. Es poco creíble que un barril pueda tener y dejar todas las evidencias en todas las áreas donde se están reportando presencia de hidrocarburo”, precisó.
“Son informaciones o parámetros que van a determinar cuál es la dificultad, lo que hay que hacer, la recuperación o remediación en esos lugares. No hay una certeza aún porque hay información que todavía no está claramente determinada”, agregó.
No obstante, hizo notar que en el reciente comunicado de OEFA se deja entrever que hay la posibilidad de que la fuga de hidrocarburo continúe y que, por esa razón, le haya puesto un plazo a Petroperú para “identificar y controlar la fuente del derrame de hidrocarburo en un plazo máximo de tres días.
“Lo primero que pide OEFA en su comunicado es que Petroperú identifique y cierre la fuga. La OEFA, en su primer punto del comunicado, señala que, de las acciones que tiene que hacer Petroperú, es identificar y cerrar la fuga de hidrocarburos. Entonces, para OEFA, por lo menos, hay la posibilidad de que siga habiendo una fuga, tal vez no a borbotones, pero lo pone dentro de las acciones que debe hacer Petroperú”, aseveró.
Sueiro cuestionó la versión de Petroperú al tratar de minimizar el impacto del derrame para destacar su supuesto avance de labores de limpieza y discrepa del cálculo respecto a que serían 10 mil metros cuadrados de zona marina afectada por derrame de petróleo.
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“En realidad, todos son optimistas por posicionamiento corporativo, todos piensan que es una situación transitoria, nadie de los involucrados te va a decir que estamos frente a una catástrofe, incluso minimizan cuánto combustible e hidrocarburo se ha vertido”, apuntó.
“Discrepo con esa apreciación de OEFA (sobre el cálculo de la zona afectada), no es muy certera. Me refiero a que probablemente fueron 10 mil metros cuadrados hace dos o tres días, pero claramente ya no son 10 mil metros cuadrados hoy, ya que el petróleo está llegando a Cabo Blanco y son cuatro playas (afectadas)”, agregó.
Pescadores y vecinos desmienten a Petroperú
Los pescadores y vecinos del distrito de Lobitos informaron que los trabajadores contratados por Petroperú para realizar de limpieza han dejado los desechos en las playas que precisamente debían limpiar, según el portal Norte Sostenible.
Además, advirtieron que las playas siguen con rastros de petróleo, pese a que el gerente general de Petroperú, Óscar Vera, había señalado que prácticamente ya habían concluido con las labores de limpieza y que el agua de mar de esa “ya estaba cristalina”.
En ese contexto, la Defensoría del Pueblo supervisó la playa Las Capullanas, ubicada a 10 km al norte de la refinería de Talara, en donde detectó arena de color negro con olor a petróleo. Asimismo, confirmó que cinco playas del distrito de Lobitos fueron afectadas.
Ante ello, la entidad solicitó a Petroperú informar sobre las causas que originaron los hechos en el distrito de Lobitos, provincia de Talara, y las acciones de respuesta inmediata o plan de contingencia que activaron para atender la problemática.
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Asimismo, la Oficina Defensorial de Piura solicitó a la Oficina Desconcentrada del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) remitir información sobre las acciones de supervisión y fiscalización realizados. Y, en caso se cuente con los resultados de los análisis realizados, proporcionar el informe correspondiente.
Petroperú afirma que labores de limpieza en la playa Las Capullanas han culminado
Petroperú afirmó que las labores de limpieza en la playa Las Capullanas han culminado tras el derrame de petróleo y que se ha contratado los servicios de empresas especializadas para las evaluaciones finales y acciones que resulten necesarias en las siguientes etapas.
En un comunicado, la petrolera estatal detalló que coordina con las autoridades locales, gremio de pescadores de Lobitos, y pobladores de la zona las próximas acciones a realizar para que se “puedan continuar con las actividades turísticas y económicas con normalidad”.
“Desde el primer día, la empresa ha desplegado el plan de mitigación a fin de minimizar el impacto en la zona afectada. En ese sentido, Petroperú reafirma su compromiso con la transparencia, la protección del ambiente y el bienestar de la sociedad en su conjunto”, indicó.
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“Finalmente, la empresa exhorta a los medios de comunicación y a la opinión pública, en general, a no publicar imágenes o información que no corresponda a la realidad. Para ello, se les invita a informarse adecuadamente, y de manera objetiva”, agregó.