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Real Betis volvió a encender el espíritu navideño con una emotiva tradición durante su partido frente a Getafe en el Estadio La Cartuja. Como cada temporada, los hinchas verdiblancos arrojaron cientos de peluches desde las tribunas hacia el campo en el entretiempo, un gesto solidario que busca que los juguetes recolectados sean entregados a niños necesitados en las fiestas de fin de año.
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La iniciativa, conocida como la lluvia de peluches, se realiza tradicionalmente en los encuentros béticos cercanos a la Navidad y se ha consolidado como uno de los momentos más simbólicos del calendario futbolístico español. Los aficionados llevan juguetes a los estadios para luego lanzarlos al césped, donde personal del club y voluntarios se encargan de recogerlos y destinarlos a organizaciones benéficas.
Este gesto no solo enriquece el ambiente festivo del fútbol, sino que también refleja el compromiso social de la afición y del club con los más vulnerables. Real Betis Balompié, desde que instauró esta práctica, ha logrado reunir decenas de miles de juguetes a lo largo de los años, consolidando la tradición como una forma de dar alegría a quienes más lo necesitan durante la temporada navideña.
El impacto de la lluvia de peluches trasciende el resultado deportivo y se ha convertido en un símbolo de generosidad y unión entre los seguidores, quienes año tras año renuevan su compromiso con esta causa solidaria en cada partido previo a las celebraciones de fin de año.




