Lunes, Mayo 20

La declaración de Biden se dio horas después de que se informara que Estados Unidos detuvo la semana pasada el envío de 3.500 bombas a Israel luego de que ese país no diera respuesta a las “preocupaciones” de Washington sobre sus planes de invadir Rafah.

MIRA: Dmitry Khoroshev, el hacker más buscado del mundo por el que EE.UU. ofrece una recompensa de US$10 millones

Desoyendo las advertencias de Estados Unidos y en plena negociación mediada por Egipto para llegar a una tregua con Hamás, el ejército de Israel desplegó el martes tanques en Rafah y tomó el control del lado palestino del puesto fronterizo con Egipto. El día anterior, había ordenado evacuar a unas 100.000 personas del este de la ciudad.

Una fotografía tomada el 6 de mayo de 2024 muestra humo ondeando tras el bombardeo al este de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, en medio del conflicto en curso entre Israel y el movimiento palestino Hamás. (Foto de AFP).

Además, Israel ha bombardeado la zona donde ordenó el desalojo, dejando decenas de muertos y heridos.

Netanyahu considera que una operación terrestre en Rafah es necesaria para mantener la presión sobre Hamas para que libere a los rehenes y lograr la victoria final.

“En Gaza han muerto civiles como consecuencia de esas bombas y de otras formas en que atacan centros de población”, dijo Biden a CNN al referirse a las bombas de 907 kilos que el presidente decidió no entregar.

“Dejé claro que si entran en Rafah, no suministraré las armas que se han utilizado históricamente para encargarse de lugares como Rafah, para encargarse de las ciudades”, dijo Biden.

De acuerdo con CNN, Biden se ha visto sometido a enormes presiones, incluso de miembros de su propio Partido Demócrata, para que limite los envíos de armas a Israel en medio de una crisis humanitaria en Gaza.

Biden precisó que Estados Unidos seguirá suministrando armas defensivas a Israel, como los de su sistema de defensa antiaérea Domo de Hierro, pero otros envíos cesarían en caso de que comenzara una invasión terrestre de Rafah, la ciudad palestina donde se refugian más de un millón de palestinos que han sido desplazados de las zonas que han sido arrasadas por Israel.

“Vamos a seguir asegurándonos de que Israel esté seguro en términos del Domo de Hierro y su capacidad para responder a los ataques como los que ocurrieron en Medio Oriente recientemente… Pero no vamos a suministrar las armas y la munición de artillería“, insistió Biden en la entrevista.

En respuesta a Biden y sin mencionarlo, este jueves Netanyahu dijo en un video: “Hoy somos mucho más fuertes. Estamos decididos y unidos para derrotar a nuestro enemigo y a quienes buscan nuestras almas. Si tenemos que estar solos, lo estaremos solos. Lucharemos con uñas y dientes (…) Venceremos juntos”.

La guerra en Gaza estalló el 7 de octubre del 2023 tras un ataque de los milicianos de Hamás en Israel que dejó 1.160 muertos, la mayoría civiles. Además, los islamistas secuestraron a unas 250 personas y se las llevaron a Gaza.

Ese mismo día, Israel declaró la guerra a Hamás prometió aniquilar al grupo islamista. Hasta el momento, la ofensiva aérea y terrestre israelí ha provocado más de 34.900 muertos en Gaza, la mayoría mujeres y niños.

La bombas capaces de arrasar barrios enteros

El Pentágono conformó que se suspendió el envío de “municiones de gran carga” debido a las posibles operaciones de Israel en Rafah sin un plan para salvaguardar la integridad de los civiles de la zona.

El paquete de armas ofensivas que Estados Unidos ya no entregará a Israel incluía 1.800 bombas Mark 84 (MK84) de 907 kilos (2.000 libras) y 1.700 bombas Mark 82 (MK82) de 227 kilos (500 libras).

Las bombas Mark 84 y Mark 82 no están guiadas por sistemas de precisión. Sin embargo, NBC News recalcó que en el pasado Estados Unidos ha proporcionado a Israel el sistema JDAM, que básicamente permite convertir una bomba normal en una de precisión.

Estas bombas de gran tamaño suelen causar daños entre la población civil e Israel ya las ha usado en Gaza.

El diario The Washington Post aseguró que Israel las usó en el bombardeo al campo de refugiados de Yabalia el 31 de octubre del 2023 que dejó decenas de civiles muertos y destruyó numerosos edificios.

“Estas son las bombas que pueden destruir manzanas enteras”, dijo un alto funcionario de la administración Biden al referirse a las MK84.

Las bombas MK84 dejan cráteres en la tierra de 12 metros de ancho o más y pueden enviar metralla mortal a cientos de metros del lugar del impacto. Casi nunca son utilizadas por los ejércitos occidentales en lugares muy poblados debido al riesgo de víctimas civiles, precisó el Washington Post.

CNN aseguró que un análisis hecho por ellos a partir de imágenes de satélite de principios de la guerra en Gaza encontró más de 500 cráteres de impacto consistentes con el uso de una bomba de una tonelada.

Marc Garlasco, exanalista de inteligencia de defensa estadounidense y exinvestigador de crímenes de guerra de la ONU, declaró en diciembre que la densidad del primer mes de bombardeos israelíes en Gaza “no se había visto desde Vietnam”.

Antes de la decisión de Biden, funcionarios estadounidenses consultados por NBC News aseguraron que Israel garantizó a Estados Unidos que las armas suministradas estaban siendo usadas dentro de las leyes de la guerra, cumpliendo así los requisitos del nuevo memorando de seguridad nacional de la Casa Blanca que exige que las armas entregadas por Washington cumplan con esas regulaciones.

En este punto, cabe precisar que Israel recibe 3.800 millones de dólares al año en asistencia militar de Estados Unidos. Sin embargo, anota NBC News, hay crecientes críticas al continuo suministro de armas por parte de Washington a ese país, en medio del escrutinio internacional de las tácticas militares de Israel en Gaza y un creciente número de muertes civiles.

El Washington Post recordó que el envío de armas a Israel preocupa incluso a demócratas aliados de Biden, que consideran que EE.UU. tiene la responsabilidad de retener armas en ausencia de un compromiso israelí de limitar las bajas civiles.

Opinión…

“Netanyahu está bajo presión por varios frentes”

Por Francisco Belaunde Matossian

Analista internacional

La decisión de Biden de no enviar más armas ofensivas a Israel podría frenar en parte la decisión de realizar una invasión masiva en Rafah. Pero por otro lado, así como Netanyahu tiene la presión de Estados Unidos, también la tiene internamente por parte de sus aliados en el Gobierno, los ministros de extrema derecha que están empujando para que haya esta ofensiva. 

Entonces, lo que más le interesa a Netanyahu es mantenerse en el poder y está en una situación bastante complicada. A ello hay que sumarle la presión de un tercer actor, que es Egipto, país que no quiere una ofensiva mayor cerca de su territorio, pues muchos palestinos desesperados por escapar pueden intentar pasar al otro lado de la frontera.

De manera paralela al campo de batalla, se están llevando a cabo las negociaciones para un posible alto el fuego. Según algunos analistas israelíes, lo que Netanyahu quiere es que estas conversaciones se vayan extendiendo, por eso pone pretextos para que no se llegue a un acuerdo, pues si hay un pacto le puede generar problemas a nivel interno. Aunque también es verdad que Hamás tiene algunas posturas que pueden ser inaceptables. 

En cuanto a si lo dicho por Biden es un cambio en su política hacia Israel, hay que notar que Estados Unidos ya ha lanzado advertencias a ese país. Por ejemplo, ha castigado por primera vez a los colones extremistas israelíes por lo que están haciendo en Cisjordania. También estaría por sancionar a una unidad israelí que también ha cometido excesos en Cisjordania. De alguna manera, Estados Unidos busca advertir a Israel de a pocos, no es una decisión drástica que signifique un cambio de rumbo en las relaciones bilaterales.

Las reacciones en Israel

En reacción a lo anunciado por Biden, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, recordó el jueves a los “amigos y enemigos de Israel” que la nación no parará hasta “lograr todos sus objetivos” en Gaza.

“El Estado de Israel no puede ser sometido, ni el Ejército, ni el sistema de defensa. Nos mantendremos firmes, lograremos nuestros objetivos. Atacaremos a Hamás, atacaremos a Hezbolá y lograremos la seguridad”, afirmó Gallant en una ceremonia en memoria de los caídos y las víctimas del terrorismo de Israel.

Gallant insistió en que “cueste lo que cueste” garantizarán la existencia del Estado de Israel y en que “eliminarán” todas las amenazas contra las que dice “intentan destruirlos”, reseñó la agencia EFE.

“No tenemos otra opción, no tenemos otro país. Haremos todo lo que sea necesario, y repito, todo lo que sea necesario, para defender a los ciudadanos de Israel”, aseveró.

Mientras que El embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, calificó de “muy decepcionante” la amenaza de Biden.

“Si se impide a Israel entrar en una zona tan importante como el centro de Rafah, donde hay miles de terroristas, rehenes y dirigentes de Hamás, ¿cómo se supone que se va a lograr el objetivo de aniquilar a Hamás?”, se preguntó el embajador.

Por su parte, el ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, pidió al ejército “conquistar” Rafah de inmediato.

“Se trata de conquistar Rafah por completo y cuanto antes mejor”, dijo Smotrich en un mensaje en su cuenta en la red social X, donde también aludió a Estados Unidos.

“Cuando se estableció el Estado de Israel nos vimos obligados a declararlo a pesar de la fuerte oposición del secretario de Estado (estadounidense George) Marshall. A medida que nos acercamos a nuestra Día de Independencia se nos recuerda, una vez más, que nuestra Guerra de Independencia aún continúa”, tuiteó Smotrich.

En tanto, el ultranacionalista ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, tuiteó que “Hamás ama a Biden”, escribiendo los nombres de ambos separados por un corazón.

Tras este mensaje, informó EFE, el jefe de la oposición israelí, Yair Lapid, pidió a Netanyahu que cese al ministro por poner en peligro “a todos los soldados y los ciudadanos del Estado de Israel” al provocar a Estados Unidos.

El presidente de Israel, Isaac Herzog, trató de poner paños fríos al asunto y reiteró el jueves en un comunicado que Biden es “un gran amigo” del país hebreo y dijo que es responsabilidad de todos “evitar declaraciones y tuits sin fundamento, irresponsables e insultantes que perjudican la seguridad nacional y los intereses del Estado de Israel”.

Compartir
Exit mobile version