El presidente de Argentina, Javier Milei, asistió este viernes junto a otras autoridades de su Gobierno y a la comandante del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson, al acto de entrega del avión militar de transporte Hércules C-130, entregado por EE.UU. a Argentina.
En un discurso, Milei agradeció a la comandante Richardson la transferencia por convenio de la aeronave a la Fuerza Aérea Argentina.
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Los aviones Hércules son las principales aeronaves de transporte técnico medio-pesado de las fuerzas armadas de varios países del mundo, entre ellos Argentina, Estados Unidos, Chile, Brasil o España.
“(La transferencia del avión de transporte) demuestra los firmes lazos de cooperación entre nuestras naciones”, aseguró el mandatario argentino, que ha expresado en varias ocasiones su alineamiento con EE.UU. y con Israel en términos geopolíticos.
Milei destacó que EE.UU. y Argentina son países “fundados al calor de las mismas ideas”, entre las que destacó la de la “libertad”, su principal ‘leitmotiv’ político.
En este sentido, el presidente libertario rechazó las “tiranías” del mundo y aseguró que, con su renovada alianza con EE.UU., Argentina “ha decidido reintegrarse en el concierto de las naciones”.
“Es una nueva doctrina en política exterior”, destacó el mandatario.
Richardson, que inició el pasado martes un viaje oficial por el país suramericano, se reunió el jueves con el mandatario argentino en la ciudad de Ushuaia (sur del país).
En “la ciudad más austral del mundo”, el presidente resaltó el valor de la Base Naval Integrada de Argentina y EEUU en Tierra del Fuego -cuyas obras se iniciaron en 2022, bajo la Administración del peronista Alberto Fernández (2019-2023)- como “gran centro logístico que constituirá el puerto de desarrollo más cercano a la Antártida”.
La visita de Richardson a Argentina también ha puesto en el centro de la diana política a la base con fines espaciales china que opera desde 2017 en la provincia patagónica de Neuquén y que EEUU objeta por presuntos objetivos militares.
Milei y su Gobierno han anunciado que inspeccionarán la estación espacial para comprobar que los únicos fines de China en la base son científicos.