
Cuando llegó a Miami con su hija, se instaló en Sunny Isles, en un condominio seguro y cerca de la playa. Un espacio que, aunque le brinda tranquilidad, no le responde la pregunta que aún se hace: ¿es este realmente mi lugar? “El sistema de salud es muy bueno, la seguridad también, y por mi hija hago sacrificios. Quizás a mi edad no logre mucho más, pero por ella vale la pena”, enfatiza.
Sus primeros trabajos en EE.UU.
Como para muchos migrantes, para Effio los primeros meses fueron los más duros. “Hice de todo. Trabajé como valet parking, en recepción de hoteles, en un restaurante. Gracias a Dios aquí hay mucho trabajo, pero en términos actorales la plaza es reducida pese a que Miami cuenta con cadenas como Telemundo y canales de cable”, explica la actriz.
“Sabía que mudarme a EE.UU. no sería fácil: créditos, alquiler, conseguir un auto… Pero ya estaba aquí, sin vuelta atrás. Había vendido hasta mi alma en Perú y solo quedaba empezar”, cuenta.
Lejos de casa, encontró en las redes sociales una forma de seguir vigente y generar ingresos. “Sigo siendo influencer. En Perú tengo mis cuentas activas en TikTok, Instagram y Facebook. Nunca quiero perder ese cordón umbilical con mi país”, afirma.
Sobre los rumores de que abrió OnlyFans, aclara que recibió una invitación, pero en su momento decidió no aceptar por los prejuicios que existen en Perú.
“Cuando llegué a Estados Unidos, me ofrecieron Unlok, que es más tranquila, coqueta, sin llegar a lo explícito. Lo probé como una travesura y ahí quedó”, detalla.
Un antes y un después
Maricielo Effio alcanzó la fama a los 16 años tras ganar el concurso La Paquita Peruana, un logro que marcó su vida para siempre. “Fue un antes y un después. Lo mejor que me pasó. La Paquita fue todo para mí, algo inolvidable”, confiesa con emoción.
Aunque vive en Estados Unidos, Maricielo sigue vinculada con el mercado laboral peruano. “Vivir aquí no me impide seguir trabajando en Perú. Recibí tres ofertas para regresar: una hace dos meses y otra recientemente para ‘El Gran Chef: Famosos’ y la telenovela ‘Eres mi sangre’. Con esta última estuvimos en conversaciones, pero no llegamos a un acuerdo”, explica.
Mientras espera nuevas oportunidades actorales, se gana la vida bailando en eventos y espectáculos, compartiendo escenario con George Neyra, un talentoso bailarín peruano que alguna vez fue su alumno. “Me emociona verlo crecer. Es increíble compartir esta pasión con alguien que formé en mi escuela de baile”, dice con orgullo.
Pero su camino no termina ahí. Con la misma energía que pone en la danza, Maricielo apunta a nuevos horizontes y sueña con abrirse paso en la televisión americana. “Me encantaría ser presentadora de noticias o conducir un programa de entretenimiento con una mirada más fresca y respetuosa, lejos del chisme”, afirma con entusiasmo.
Nueva etapa personal
Maricielo Effio lleva ocho años sin pareja y afirma que ha sido una decisión personal. Tras su separación de Ernesto Pacheco, su exesposo y padre de su hija, Brissa, se enfocó en sacar adelante a su hija y reorganizar su vida en Estados Unidos.
“Volver a empezar después de 17 años no fue fácil, pero ahora mi hija tiene 11 años y siento que ya es momento de pensar en mí también”, explica.

Ante los rumores de una posible relación con su actual compañero de baile, lo descarta. “Ya tuve un bailarín en mi vida. Con todo el respeto que le tengo a los bailarines, pero ya no”, afirma.
A pesar de los nuevos desafíos que enfrenta en su vida profesional, asegura que vivir en Estados Unidos no le impide seguir trabajando en Perú. De hecho, recientemente recibió tres propuestas para regresar, dos de ellas en los últimos meses: una para el programa “El Gran Chef: famosos” y otra para la telenovela “Eres mi sangre”. “Con esta última estuvimos en conversaciones, pero no llegamos a un acuerdo”, comenta, mostrando su deseo de seguir explorando nuevas oportunidades en su tierra natal.
Además de sus proyectos televisivos, Maricielo tiene un objetivo claro: expandir su carrera en la conducción. “Ahora me encantaría ser animadora de noticias o locutora de noticias aquí, o conducir un programa de entretenimiento, pero no los típicos programas de chismes. Quiero algo con otra mirada, más respetuosa y seria, pero sin dejar de ser humorística. Algo más fresco”, aclara
En espera de justicia
Maricielo Effio ha pasado por momentos difíciles, tanto en su carrera como en su vida personal. Uno de los desafíos más grandes ha sido el juicio que le interpuso al cirujano Víctor Fong por una mala praxis, un tema que no ha dejado de afectarla emocionalmente.
“La justicia en el Perú es una de las cosas que te hacen pasar de un estado de ira a un estado de decepción”, confiesa con tristeza. Fue una de las primeras en alzar la voz en los medios, alertando sobre las malas prácticas médicas que sufrió debido a una cirugía mal hecha. Según Maricielo, el cirujano no cumplió con el proceso prometido y, como resultado, su abdomen no quedó como esperaba.
Además, el caso de la joven Muñequita Milly, que falleció después de someterse a una cirugía estética con el mismo cirujano, hizo que Maricielo tomara la decisión de continua con más fuerza con su lucha, no solo por ella, sino por todas las personas que podrían ser víctimas de negligencias médicas. “Es triste ver que médicos como él siguen ejerciendo, a pesar de los antecedentes catastróficos”, expresa. “Mi país me duele. Perú es el reino de la impunidad”, afirma con pesar.
A pesar de todo, no pierde la fe. “Sé que el momento que quiero que llegue va a llegar. Ya logré mucho”. La experiencia, aunque difícil, le ha dado la fuerza para seguir adelante, con la esperanza de que la justicia se haga algún día.
Maricielo ha aprendido que los golpes de la vida no son gratuitos, y con cada uno de ellos ha crecido más fuerte. Ahora, además de su trabajo en la danza y en la televisión, tiene claro lo que busca: “Quiero realizarme personalmente, quiero una nueva familia y un compañero que sea mi complemento, que aporte paz”, subraya.