Una fuerte señal del ascenso demócrata se vio reflejada en la encuesta del New York Times/Siena College que fue publicada el sábado y donde se revela que Harris supera a Trump por un margen idéntico de 50% a 46% en los estados clave de Michigan, Pensilvania y Wisconsin.
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Durante casi un año, las encuestas en esos estados dieron a Trump empatado o ligeramente por delante de Biden, recuerda el NYT.
Además, cuando en octubre del año pasado el diario estadounidense hizo una encuesta en esos tres estados, y puso como alternativa a un demócrata anónimo, este aventajó a Trump en 10 puntos. Cabe precisar que ese mes Trump ganaba a Biden y a Harris por un punto en Michigan, Pensilvania y Wisconsin.
Entonces, casi un año después, ese demócrata anónimo que le ganaba claramente a Trump podría en estos momentos estar siendo encarnado por Harris debido al extraordinario impulso que ha ganado su candidatura, anota el NYT.
La campaña de Trump ha minimizado el resultado de la encuesta del sábado del New York Times al decir que fue divulgada para desanimar el apoyo al republicano. Además, manifestó que históricamente se ha subestimado el porcentaje de votos del magnate.
Bajo el sistema de votación del Colegio Electoral en Estados Unidos, los estados de Michigan, Pensilvania y Wisconsin, en la región Medio Oeste, son considerados clave para apuntalar la victoria de cualquiera de los candidatos. Los otros estados codiciados son Nevada, Arizona, Georgia y Carolina del Norte.
En las elecciones del 2020, Biden ganó en Nevada, Arizona, Georgia, Pensilvania, Wisconsin y Michigan, mientras que Trump solo se impuso en Carolina del Norte.
El pasado martes, Harris fue nombrada de manera oficial como la candidata del Partido Demócrata a la presidencia y el mismo día eligió al gobernador de Minnesota, Tim Walz, como su fórmula a la Vicepresidencia.
La dupla no perdió el tiempo y de inmediato hizo una gira por varios estados clave, incluyendo Wisconsin, Nevada y Arizona.
En Arizona el viernes, y ante unos 15.000 simpatizantes, Harris buscó el voto hispano al culpar a Trump de bloquear la ley bipartidista de seguridad fronteriza. “Sabemos que nuestro sistema de inmigración está roto, y sabemos lo que se necesita para arreglarlo: una reforma integral que incluya una fuerte seguridad fronteriza y un merecido camino a la ciudadanía”.
Trump no visitó estados clave la semana pasada. El viernes estuvo en Montana, donde en un discurso alimentó la teoría de que Biden retomaría su campaña a la reelección: “He escuchado que va a regresar a la Convención Demócrata. Entrará en el salón y dirá que va a quedarse, que quiere ser su presidente de regreso. Y otra oportunidad para debatir con Trump”, dijo.
La candidatura de Harris descoloca a Trump
En la encuesta del New York Times, la mayoría considera a Harris honesta e inteligente, dice que aporta el tipo de cambio adecuado y que tiene el temperamento para ser presidenta, además de poseer una visión clara para el país. La mayoría no cree que esté demasiado a la izquierda: solo el 44% de los votantes probables respondió que es demasiado liberal o progresista, frente al 44 % que dijo que no está demasiado a la izquierda y otro 6 % que manifestó que no es suficientemente progresista.
Juan Pablo Toro, director ejecutivo del think tank de relaciones internacionales AthenaLab y analista geopolítico, considera que el resultado de la encuesta tiene que ver en parte con el mérito de Kamala Harris y también con los problemas de su rival.
“Una vez que Biden anuncia que no va a competir, Harris logra rápidamente conseguir todos los apoyos del Partido Demócrata, incluidos ex presidentes y otros serctores, y los pone tras de sí de forma muy rápida. Ello a su vez le permite acceder a los fondos necesarios para financiar su campaña. Eso lo hace de forma muy eficiente”, manifiesta Toro a El Comercio.
Destaca que luego Harris comienza a construir una imagen nueva sobre lo que representa ella versus Trump. “Apela a la idea de que es la fiscal, porque ese es su pasado, contra el criminal, por todos los procesos que tiene abierto Donald Trump. Y eso es muy fácil de entender para los estadounideses, funciona bien, ella recaba apoyos y cambia la forma de entender la campaña”.
Toro también manifiesta que al asumir Harris la candidatura, el tema de la edad, que era uno de los grandes ejes que tenía Trump, se desmorona.
“Trump tenía una campaña muy bien hecha para enfrentar a Biden, cuestionarlo por su capacidad, por su condición de salud para gobernar, pero una vez que aume Harris quedan descolocados, no le pueden atacar por eso porque ahora Trump es la persona mayor y Harris es mucho más joven, ya eso no sirve. Y por otro lado, ella es mujer, Trump tiene relaciones difíciles con las mujeres, también se ha metido en el tema racial para referirse a Harris y cuestionar su condición de mujer negra, y esa fue una metida de pata mayor. La campaña de Trump no ha podido ajustarse a este nuevo escenario”, enfatiza Toro.
El analista indica que ahora los republicanos están buscando un flanco vulnerable a Harris, y se están enfocando en etiquetarla como muy de izquierda, o progresista como se dice en Estados Unidos.
“Queda poco tiempo de campaña, pero lo que hemos visto hasta ahora es que una semana puede ser mucho tiempo. Ha habido un atentado, un candidato renunció, la verdad es que los giros dramáticos que está mostrando la campaña estadounidense son bastante inéditos. Hay una situación que está a punto de reventar en el Medio Oriente, Estados Unidos está desplazando portaaviones, puede haber una crisis internacional grande en la región tras el asesinato del líder de Hamás en Irán, entonces eso también podría incidir en la elección. El otro día hubo datos de desempleo no muy buenos y cayeron los mercados. Entonces, esta elección parece más una maratón que una carrera de 100 metros, se va a jugar muy hasta el final”, pronostica Toro.
De acuerdo con la agencia Reuters, en público Trump y sus aliados han intentado presentar a Harris como una liberal desfasada de la realidad y vincularla con las impopulares políticas de Biden sobre inmigración e inflación. Pero internamente, nueve fuentes le dijeron a Reuters que ven a la vicepresidenta como una oponente mucho más difícil que Biden.
A diferencia de Biden, a quien los republicanos cuestionaban por su edad (81 años) y alegaban que tiene un déficit en su capacidad mental, Trump, de 78 años, se enfrentará a una candidata demócrata más joven (59 años) y dinámica que ha dinamizado la base demócrata y ha recaudado cientos de millones de dólares en donaciones en cuestión de días.
“Está claro para todos que ella podría ganar”, dijo a Reuters un importante asesor de Trump, que habló bajo la condición de anonimato.
¿Es temporal o se mantendrán los buenos números para Harris? El NYT dijo que la vicepresidenta ahora será objeto de mucho más escrutinio y ataques. Agregó que hasta el momento se ha beneficiado de unas semanas de cobertura mediática muy favorable, de importantes apoyos y de una avalancha de buena voluntad por parte de los votantes que anhelaban una alternativa a dos candidatos de mayor edad. Pero aseguró que este periodo no durará siempre.