La presidenta del país, Dina Boluarte, asistió en la mañana del domingo a la misa del Domingo de la Divina Misericordia, llevada a cabo en la Catedral de Lima. La jefa del gobierno estuvo acompañada por los miembros del Gabinete Ministerial, encabezados por el primer ministro, Gustavo Adrianzén, en esta ceremonia litúrgica que tiene un significado especial para los católicos.
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El Domingo de la Divina Misericordia fue establecido por el papa San Juan Pablo II y se conmemora el segundo domingo después de Pascua, resaltando la fe en el amor y la compasión de Dios hacia la humanidad. Durante la ceremonia, se ofrecieron oraciones por la paz, la cohesión y la solidaridad entre los ciudadanos peruanos.
Cabe recordar que Boluarte anunció recientemente la realización de una misa especial en honor al papa Francisco, una semana después de su fallecimiento. La presidenta evocó con emotividad las palabras de cariño que el pontífice dirigió al pueblo peruano en encuentros pasados.
“Al enterarnos del fallecimiento del santo padre recordé algunas palabras de cariño al pueblo peruano del papa, aquella vez que me reuní en Roma. Este domingo que se cumplen siete días de su sensible fallecimiento, en Palacio estaremos realizando una misa en su honor”, expresó la jefa de Estado.
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En el contexto de estas actividades espirituales, Boluarte también subrayó recientemente la sanción de la ley que integra a las personas con discapacidad en el sistema de Alerta Amber, ampliando así los recursos de protección inmediata ante casos de desaparición.
La presidenta subrayó que esta reforma “es una respuesta concreta para miles de peruanas y peruanos que, por años, fueron ignorados por el Estado”, reafirmando así el compromiso de su gobierno con una gestión inclusiva y con sensibilidad social.
