Domingo, Mayo 19

Cada 8 de mayo se celebra el Día Mundial del Cáncer de Ovario, la fecha ideal para concientizar a la población sobre los factores de riesgo y la importancia de los controles ginecológicos periódicos. Cabe destacar que, según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), alrededor del 20% de los casos de esta enfermedad son hereditarios, asociados mayormente a mutaciones de los genes BRCA 1 y BRCA 2, por lo que los chequeos y las cirugías preventivas tienen un rol sumamente importante en la salud de las personas.

“El cáncer es una enfermedad en la cual las células anormales del cuerpo comienzan a multiplicarse sin control. El cáncer de ovario es un grupo de enfermedades que se originan en los ovarios o en las áreas vinculadas de las trompas de Falopio y el peritoneo, el cual tiene varios subtipos histológicos según su estirpe celular”, estableció el Dr. Alejandro León, Jefe en Oncología Médica de ALIADA Centro Oncológico.

Tipos de cáncer de ovario, según el SEOM:
Carcinoma epitelial: Representa el 85-90% de los cánceres de ovario.
Tumores de células germinales: Muy infrecuentes
Tumores del estroma: Aún más infrecuentes.

Para entender mejor la enfermedad, es importante aclarar que cada mujer tiene dos ovarios, los cuales se encuentran a cada lado del útero. En palabras de la SEOM, este órgano desempeña dos funciones vitales en el organismo:

  • La producción del gameto femenino (ovocito): Cada mes, durante la ovulación, el ovario libera un ovocito que viaja por la trompa (pequeño conducto que comunica el ovario con el útero) hasta el útero.
  • La secreción de hormonas femeninas: El ovario es la fuente principal de estrógeno y progesterona, las hormonas femeninas implicadas en varios procesos como la regulación del ciclo menstrual, el embarazo, el crecimiento de las mamas, entre otros más.

¿Cuáles son los síntomas del cáncer de ovario?

La Dra. Adria Suarez Mora, ginecóloga oncóloga de Cleveland Clinic, hizo énfasis en que el cáncer de ovario puede desarrollarse y extenderse por todo el abdomen antes de incluso causar síntomas. Las señales podrían incluir:

  • Dolor, malestar o hinchazón pélvico o abdominal.
  • Cambios en los hábitos alimentarios, saciedad prematura y pérdida del apetito.
  • Secreción vaginal o sangrado anormal, especialmente si el sangrado ocurre fuera de su ciclo menstrual típico o después de haber pasado por la menopausia.
  • Cambios intestinales, como diarrea o estreñimiento.
  • Un aumento en el tamaño de su abdomen.
  • Orinar con más frecuencia (micción frecuente).
El dolor y los problemas estomacales persistentes son síntomas de cáncer de ovario.

“Si desarrolla alguno de los síntomas enumerados anteriormente, programe una visita con un médico. Aunque, a pesar de años de investigación, los expertos aún no han desarrollado una prueba de detección completamente exitosa del cáncer de ovario, sí existen algunos exámenes adicionales para, junto al análisis de los síntomas, dar un diagnóstico adecuado”, indicó la experta de Cleveland Clinic.

Las pruebas adicionales, de acuerdo con la Dra. Suarez, incluyen ciertas pruebas de imagen, como resonancias magnéticas, tomografías computarizadas y tomografías por emisión de positrones. Del mismo modo, es posible que el especialista ordene un análisis de sangre, el cual busca una sustancia llamada CA-125.

“Los niveles altos de CA-125 en la sangre pueden ser un signo de cáncer. Sin embargo, los niveles de CA-125 pueden ser normales, incluso cuando hay cáncer, y más altos en muchas afecciones que no son cáncer. Debido a esto, los médicos utilizan análisis de sangre en combinación con otras pruebas para diagnosticar el cáncer de ovario”, esclareció la ginecóloga oncóloga.

En esa línea, también se puede incluir una evaluación quirúrgica y una laparoscopia. “Durante la cirugía laparoscópica, un cirujano coloca una cámara delgada (laparoscopio) a través de un pequeño corte (incisión) realizado en su abdomen. Usando el endoscopio como guía, junto con puertos adicionales para sostener instrumentos, el cirujano puede evaluar el cáncer, realizar biopsias de estadificación y, en algunas circunstancias, extirpar tumores de ovario”, explicó Suarez.

¿Cuáles son los factores de riesgo para padecer de cáncer de ovario?

Entre los factores de riesgo, el Dr. Alejandro León incluyó los siguientes:

  • Ser una mujer de mediana edad o mayor: Según el SEOM, el cáncer de ovario es una enfermedad más frecuente en las mujeres postmenopáusicas, con la máxima incidencia entre los 50 y 75 años.
  • Tener familiares cercanos (como madre, hermana, tía o abuela) maternas o paternas que hayan tenido cáncer de ovario.
  • Tener una mutación genética (cambio) que aumente su riesgo, inclusive la BRCA1 o BRCA2 o una mutación genética asociada con el Síndrome de Lynch.
  • Haber tenido cáncer de mama, de útero o colorrectal.
  • Ser descendiente de judíos (asquenazí) de Europa oriental.
  • Tener endometriosis, afección en la que el tejido que recubre el útero crece en otras partes del cuerpo.
  • No haber tenido hijos o haber tenido dificultad para quedar embarazada.

“No hay manera de prevenir completamente el cáncer de ovario, pero conocer sus antecedentes biológicos familiares puede ser de gran ayuda para estar preparados ante cualquier riesgo mayor de desarrollar cáncer de ovario a prepararse para cualquier riesgo mayor de desarrollar cáncer de ovario”, enfatizó la Dra. Suarez.

En ese sentido, la doctora sostuvo que, en el caso de los pacientes que presentan una mutación genética -como la BRCA-, el doctor puede recomendar una cirugía para reducir el riesgo. “Durante esta intervención, se extirpan los ovarios y las trompas antes de que se vuelvan cancerosas”, explicó la especialista.

¿Cuáles son los estadíos del cáncer de ovario?

Conforme a la ginecóloga oncóloga de Cleveland Clinic, existen cuatro etapas del cáncer de ovario. “En este sistema de estadificación del cáncer, el menos grave es el número más bajo. Cuanto más grave sea la afección, mayor será el número”, recalcó. Los estadíos son los siguientes:

  1. Etapa I: Esta etapa se divide en tres subetapas (etapa IA, etapa IB y etapa IC). En la primera subetapa, el cáncer se encuentra solo en un ovario o en una trompa de Falopio. El estadio IB tiene cáncer en ambos ovarios o en las trompas de Falopio. En el estadio IC, el cáncer se encuentra en ambos ovarios o en las trompas de Falopio y se encuentra fuera del ovario (en el exterior del órgano mismo o en el espacio alrededor del ovario, llamado cavidad peritoneal).
  2. Etapa II: La etapa II también se divide en algunas etapas adicionales. En el estadio IIA, el cáncer ya no está solo en el ovario, sino que también se ha extendido al útero. En el estadio IIB, el cáncer se ha diseminado a otras estructuras cercanas de la pelvis.
  3. Etapa III: Esta etapa incluye tres subetapas. En el estadio IIIA, el cáncer se ha diseminado más allá de la pelvis hasta el abdomen (microscópicamente) o dentro de los ganglios linfáticos. En la segunda subetapa (Estadio IIIB), el tumor mide hasta 2 centímetros y se ha extendido más allá de la pelvis o dentro de los ganglios linfáticos. En el estadio IIIC, el cáncer se ha movido fuera del área de la pelvis y es de mayor tamaño (más de 2 centímetros) o puede estar dentro de los ganglios linfáticos. En este punto, podría afectar otros órganos, como el hígado y el bazo.
  4. Estadio IV: El cáncer en estadio IV es el más grave. En esta fase, el cáncer se ha diseminado al interior de órganos como el hígado o el bazo. En el estadio IVA, se encuentra cerca de los pulmones y en el estadio IVB, el cáncer se ha diseminado a los ganglios linfáticos de la ingle o al pecho.

“La estadificación es importante porque ayuda a su médico a diseñar un plan de tratamiento personalizado para usted. Su doctor hablará con usted sobre sus opciones de tratamiento”, aseveró la Dra. Suarez Mora.

¿Cuáles son los tratamientos actualmente disponibles para el cáncer de ovario?

El Jefe en Oncología Médica de ALIADA Centro Oncológico afirmó que, en la mayoría de casos, el tratamiento para el cáncer de ovario es una combinación entre cirugía, quimioterapia y, en bastantes ocasiones, terapia biológica. En la cirugía, por un lado, el médico extirpa el tejido canceroso por medio de una operación llamada citorreducción. Luego, la quimioterapia busca reducir el tamaño del tumor y/o eliminarlo.

“La terapia biológica, por el otro lado, es un tipo de tratamiento contra el cáncer que ataca las células cancerosas para detener o desacelerar su multiplicación y propagación. Los medicamentos pueden ser pastillas, como los inhibidores PARP para los pacientes BRCA mutados, o el bevacizumab, un antiangiogénico endovenoso”, declaró el doctor.

De la misma forma, la Dra. Suarez agregó otras terapias a la lista de tratamientos, como la terapia dirigida, la terapia hormonal y la radioterapia:

  • Terapia dirigida: Este tratamiento contra el cáncer utiliza medicamentos para identificar y atacar las células cancerosas. La terapia dirigida cambia la forma en que las células cancerosas crecen y se dividen.
  • Terapia hormonal: Algunos cánceres de ovario utilizan hormonas para crecer. Este tipo de terapia bloquea las hormonas, retardando o deteniendo el crecimiento del cáncer.
  • Radioterapia: Los doctores rara vez utilizan radioterapia para el tratamiento del cáncer de ovario.

“Una vez que el paciente haya completado el tratamiento del cáncer de ovario, su doctor querrá verlo periódicamente para mantenerlo en observación. Es posible que tenga citas de rutina para controlar y asegurarse de que el cáncer no haya regresado con el tiempo. Durante estas citas, su médico puede analizar cualquier posible síntoma y realizar un examen. Tenga en cuenta cualquier síntoma que pueda tener e infórmelo a su especialista. A veces, su doctor puede ordenar pruebas de imágenes, generalmente una tomografía computarizada”, concluyó la oncóloga de Cleveland Clinic.

Compartir
Exit mobile version