Las primarias demócratas en Carolina del Sur han empezado este sábado con la apertura de los centros de votación a las 7.00 hora local (12.00 GMT), una cita a la que el presidente estadounidense, Joe Biden, acude con la victoria asegurada, pero el reto de demostrar que aún puede movilizar a la base del partido.
Esta es la primera vez que Biden se enfrenta personalmente a las urnas desde los comicios de 2020. La cita ha generado especial atención debido a su potencial para medir el nivel de entusiasmo por el gobernante, cuyos índices de aprobación se sitúan en el 39,8 %, los más bajos de un presidente en el tercer año de su mandato desde Jimmy Carter (1977-1981), según la empresa de sondeos Gallup.
Carolina del Sur es especialmente relevante para medir el respaldo de la comunidad afroamericana a Biden, ya que se estima que el 60% de los votantes demócratas en este estado pertenecen a dicha minoría.
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La participación, elemento clave
Según el profesor Todd Shaw de la Universidad de Carolina del Sur, uno de los factores clave para evaluar el respaldo a Biden serán los niveles de participación de los votantes, especialmente entre la comunidad afroamericana.
En las primarias de 2020, acudieron a las urnas 538.263 votantes. No obstante, la dinámica era distinta, ya que en ese momento Biden competía con varios demócratas que aspiraban a la nominación del partido y, al haber más en juego, los votantes estaban más motivados para participar.
A pesar de que las circunstancias son diferentes en estas primarias, una baja participación podría ser interpretada como una mala señal para la campaña de Biden, señaló Shaw.
En cualquier caso, Biden podría proclamarse vencedor en Carolina del Sur apenas minutos después del cierre de los colegios electorales a las 19.00 hora local (00.00 GMT del domingo), dada la notable ventaja que ostenta sobre sus rivales.
Según la encuesta más reciente de las primarias demócratas, difundida por Emerson College a principios de enero, Biden encabeza la intención de voto con un sólido 69 %, superando significativamente a sus dos principales contendientes: el congresista de Minnesota, Dean Phillips (5 %), y la autora de libros de autoayuda Marianne Williamson (3 %).
Este estudio también revela que un 22 % de los votantes se encuentran indecisos, sin haber tomado una decisión sobre su preferencia o incluso si participarán en la votación.
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Primera cita demócrata
Por iniciativa de Biden, el Partido Demócrata cambió el año pasado el calendario de primarias arrebatando a Iowa y Nuevo Hampshire los primeros puestos que habían ocupado desde 1972, y concediéndole ese honor a Carolina del Sur.
Esa modificación tenía dos objetivos: reafirmar la lealtad de Biden al estado que revivió su candidatura en 2020, luego de quedar cuarto en Iowa y quinto en Nuevo Hampshire durante las primarias demócratas; y recuperar el respaldo de los votantes afroamericanos, que será cruciales en una eventual batalla con Donald Trump, favorito para ser el candidato republicano.
No obstante, a pesar de ser el estado inicial, la influencia de Carolina del Sur es relativa. En las primarias, solo se asignarán 55 delegados de los casi 2.000 necesarios para que Biden se proclame oficialmente como el candidato demócrata.
Además, Carolina del Sur no está en juego en las elecciones de noviembre, ya que está considerado como un estado conservador que no ha votado por el candidato presidencial demócrata desde 1976 con Carter.