La Unión Europea ha desatado una guerra contra Apple que empezará a causar más problemas que inconvenientes a los usuarios. Supuestas normas para proteger a los europeos del abuso de las tecnológicas que no hacen más que poner palos en las ruedas y complicar el libre mercado.
La Ley de Mercados Digitales (DMA) entró en vigor el pasado 1 de noviembre de 2022 y, desde entonces, Apple sufre las consecuencias de manera más directa. La última decisión polémica es que la App Store dejará de ser el guardián de lo que se instala en los dispositivos de Apple y llegará descontrol absoluto gracias a que se van a poder instalar aplicaciones de otras tiendas. Una jungla de aplicaciones parecida a la de Android donde las estafas y la mediocridad de muchas apps son habituales porque no hay un control exhaustivo.
Android
Si por algo se había diferenciado Apple de Android es por la capacidad de atar en corto a los desarrolladores que quisieran subir una aplicación a su tienda. El análisis es minucioso y no hay forma de colar aplicaciones maliciosas o que se lleven más datos de los que permita el usuario. Apple puede monitorizar cada aplicación y eliminarla o advertir de que sus prácticas no son las deseadas. El año pasado rechazaron más de 215.000 apps por incumplir las normas de privacidad. A cambio de pertenecer a este ecosistema, los desarrolladores pagan entre un 10 % y un 30 % de comisiones a Apple de la venta de la app o de otras compras recurrentes mediante la tienda oficial de la manzana mordida.
Apple puede monitorizar cada aplicación y eliminarla
Fortnite
La DMA no solo va a permitir la vuelta del Fortnite, también del Fornite. ¿A que no ven la diferencia? Pues eso es lo que va a ocurrir desde el 1 de enero de 2024 cuando se pueda hacer sideloading en los dispositivos de Apple, es decir, permitir la descarga de aplicaciones y juegos sin pasar por la App Store, algo así como el jailbreak y Cydia de hace 15 años, pero en versión legal, amparada por la burocracia europea.
Apple ha potenciado los beneficios de su App Store
La anarquía será total, algo parecido a lo que sucede en Android donde hay un altísimo nivel de estafas y fraudes. El bajo nivel tecnológico que tienen muchos españoles allanará el camino a los hackers gracias a esta medida dictada desde los despachos de Bruselas.
El bajo nivel tecnológico que tienen muchos españoles allanará el camino a los hackers
Pero también habrá espacio para que Facebook, WhatsApp o Instagram salgan por fin de la App Store y monten su propio chiringuito para saltarse todas las restricciones de privacidad. Eso de ‘permitir a la App que no rastreé’ ha hundido económicamente a Meta que ha dejado de acumular datos de usuarios en iPhone.