MIRA: Primer ministro chino garantiza mayor apertura ante líderes empresariales internacionales
La llamada Ruta Marítima de la Seda fue lanzada por Xi hace una década y se enmarca en la extensa estrategia de la franja y la ruta con la que se busca mejorar la integración económica y comercial de China a través de la inversión en infraestructura de transporte.
Las cifras dan cuenta de la expansión y las metas cumplidas del gigante asiático en la ambiciosa ruta que se relaciona con el mar. Hace 10 años, China estaba involucrada con 44 puertos en el mundo, pero hoy posee u opera casi 100 terminales en más de 50 países, principalmente en África y Asia. Además, de los 100 puertos más transitados del mundo, 32 cuentan con algún tipo de control del gigante asiático.
EXPANSIÓN LOGRADA EN LA ÚLTIMA DÉCADA
- 7 de los 10 puertos con más volumen comercial del mundo se encuentran en China.
- El puerto de Shanghái es el más grande del mundo.
- Más del 90% de los puertos chinos se encuentran en África y Asia
Su importancia para las cadenas de suministro globales también es innegable. Los puertos chinos tienen capacidad para gestionar un 80% más de mercancías que el resto de terminales de todos los países del sur de Asia combinados, según un análisis del medio “El orden mundial”.
Marco Carrasco, docente de Estudios de Asia Oriental de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de San Marcos, explica que la planificación portuaria de China guarda relación con un interés económico tanto en la costa este y oeste africanas, como en la costa oeste americana. “El hecho de mirar a puertos en América y sobre todo en África es parte de generar esos nuevos espacios económicos en los cuales China pueda crecer”, señala.
El experto recuerda que, si bien el gigante asiático ha tenido un proceso de recuperación tras la pandemia, el crecimiento que ha mantenido en los últimos años ha sido significativamente más moderado. “China busca, por un lado, mejoras en el dinamismo económico a escala internacional y, para ello, es importante tener una participación activa en varias de las cadenas de suministros principales en el mundo”, apunta.
Ruta geopolítica
El acceso a los puertos más allá de sus fronteras también le permite a China ampliar su influencia en la geopolítica internacional. La mayoría de los terminales en los que está involucrada han sido construidos por empresas propiedad del Gobierno Chino.
“Hay pasajes entre China y el océano Índico, con África y el Mediterráneo, hay otra parte en el Pacífico sur con Australia y también a través del océano Ártico. Es una presencia creciente en muchos países y la mayoría de empresas son estatales y tienen vínculos con el Partido Comunista Chino”, comenta el economista Alan Fairlie.
TRÁFICO E INVERSIONES MILLONARIAS
- 80% de los bienes se transportan a bordo de barcos que llevan toneladas de carga a todo el mundo.
- 30% de todo el tráfico mundial de contenedores en el 2022 recaló en uno de los puertos operados total o parcialmente por empresas con sede en Beijing, Shanghái o Hong Kong.
- 40.000 millones de dólares ha invertido China en infraestructura portuaria entre el 2016 y el 2021, según el Qianzhan Industrial Research Institute.
Esas conexiones han servido a Estados Unidos (que mantiene un enfrentamiento comercial con el gigante asiático) y a sus aliados a ver con expreso recelo la expansión portuaria china. Washington incluso ha advertido que los puertos podrían ser una amenaza militar, algo que fue replicado por otros países de Occidente en el 2017, cuando China construyó su primera base militar en el extranjero en Yibuti, en el Cuerno de África.
El diario “The New York Times” asevera que la misión militar en expansión de China se centra en establecer lo que llama “puntos fuertes estratégicos” a lo largo de sus principales rutas comerciales, energéticas y de recursos. Recuerda que China ha declarado que estos puntos están diseñados para “brindar apoyo a operaciones militares en el extranjero”.
“Es difícil deslindar la parte comercial de la política, sobre todo cuando la enorme inversión hace bastante evidente el empuje que China le da a esta red de puertos”, dice Carrasco.
PUERTO DE CHANCAY
Impacto en Brasil y Chile
El nuevo puerto peruano de Chancay, que es construido por la empresa china Cosco Shipping, ha resonado con fuerza en Brasil y Chile, dos países que se verán impactados por la ambiciosa terminal peruana.
El puerto facilitaría que Brasil, cuyo principal socio comercial es China, pueda exportar productos por más de 30.000 millones de dólares hacia el gigante asiático, con menos tiempo y ahorro en costos logísticos.
El caso chileno, por el contrario, es más retador. En el vecino del sur hay quienes ven con preocupación la construcción de este puerto, pues temen que les haga sombra a terminales como el de San Antonio y amenace las oportunidades de crecimiento de las zonas portuarias.
Mario Cassanello, presidente de la Cámara de Comercio, Industria, Servicios y Turismo de San Antonio, señaló a Emol que el puerto de Chancay podría absorber “un porcentaje importante de mercancía que proviene de China, lo que sería un duro golpe para el comercio exterior, la economía local y nacional”.