Julio Ramón, quien ahora es CEO de Moventi, emprendió el complejo camino de hacer empresa en el Perú a los 26 años. “Yo empecé solo con una laptop… yo mismo vendí la primera web a S/2.000″, cuenta. Ahora su empresa opera en EE.UU. y España con 110 colaboradores a su cargo. ¿Cuál fue el secreto?
Su camino como emprendedor fue marcado por tres hitos. El primero fue el 2018, cuatro años después de fundar la marca Perú APPS, con el desarrollo de una banca móvil para una caja municipal. Aquí ya ofrecía cuatro servicios: ‘automation & IA’, ‘cloud & infrastructure’, ‘software solutions’ y ‘talent outsourcing’. El último se fortaleció después de la pandemia.
“Antes de la pandemia, las empresas grandes contrataban consultoras de software como nosotros, pero luego las empresas se dieron cuenta que estos canales digitales o de innovación no eran un canal menor, se convirtieron en canales principales. Entonces el pensamiento cambió a ser: ‘oye, tu desarróllalo solo y me lo entregas’ a ‘es que mejor yo gestione (mi web o aplicativo)’”, recuerda el CEO de Moventi.
Fortalecer a la empresa con este nuevo servicio que consiste en proveer talento humano para el desarrollo de software a otras organizaciones le permitió dar el salto a mercados internacionales como Estados Unidos.
“Hoy en día es nuestra principal línea de servicio; movilizar el talento local a empresas grandes o top peruanas”, refiere. Este fue el tercer hito más importante en la carrera de Julio Ramón, el cual también exigió cambios que iniciaron con el nombre del negocio, pues si bien Perú APPS se posicionó en los segmentos financiero, educación y retail del país, para destacar en el extranjero su marca tenía que ser más global.
“Teníamos que mover el talento de aquí hacia afuera, porque hay mucho talento digital en el Perú. Ahí fue cuando decidimos incursionar en Estados Unidos, ¿por qué?, porque naturalmente Estados Unidos es una de las economías que más terceriza desarrollo de software en el mundo y tradicionalmente lo hacía con India o de repente con la zona de Europa del Este”, explicó.
Si bien competir con otros países era complicado, Moventi tenía dos ventajas: el capital humano de Latinoamérica ha crecido en los últimos años y es más accesible en cuanto a costos; además, la diferencia horaria entre Perú y EE.UU. es. mínima, pues hay entre 1 y 2 horas de desfase que permite al cliente hacer coordinaciones en tiempo real.
“Nosotros solamente tenemos un servicio en Estados Unidos que se llama ‘outsourcing nearshore’; es decir, cerca a tu zona horaria. Ahí nace Sudamérica como un folio de tecnología fuerte y muchas empresas hoy en día de Estados Unidos tercerizan con empresas locales. Todo fue intuitivo en la pandemia y luego de 4 o 5 meses, llegó el primer cliente”, explicó.
Salario emocional para competir en el mercado
En el camino de la tercerización, Moventi no solo compite con otras empresas como Stefanini, Canvia, Solera o Tismart, sino también con la rotación del talento especializado en la industria tecnológica.
Según Julio Ramón, un profesional se queda entre 1 a 2 años en una empresa hasta ser captado por otra. Incluso, la consultora AXPEN realizó un sondeo gerencial en el que se determinó que hay un 30 % más de dificultad para encontrar talento en profesionales dedicados a la tecnología de la información.
Ante ello, Moventi no puede arriesgarse, refirió Julio. Por ello, están pendientes de captar a sus futuros talentos desde las universidades y conforme los jóvenes vayan mejorando, los retan con proyectos más grandes.
“Me di cuenta que tenemos que hacernos lo más grande posible en el menor tiempo para que cuando lleguen esas empresas (que quieren llevarse a tu personal) compitamos al mismo nivel de salarios (porque pueden ofrecer lo mismo), y entre a tallar más bien el salario emocional y no monetario. El buen el clima laboral ha sido nuestra mayor característica”, refirió.
Facturación
Moventi inició como Perú APPS el 2014. El 2023 registró un crecimiento de 40%, y este año su facturación alcanzó los US$ 4 millones. Para el 2025 calculan llegar a US$ 7 millones porque han concretado grandes proyectos con empresas financieras.
