Los casos de delito y extorsión en el país registran un incremento y sus efectos se sienten hoy incluso en el segmento de las microfinanzas.
Según refiere la Federación Peruana de Cajas Municipales, hoy existen algunas entidades asociadas al gremio que están evaluando el cierre de sus oficinas ante casos de extorsión.
“Hay entidades y microfinancieras que están considerando cerrar agencias porque nuestros trabajadores que llegan a esos sitios están siendo extorsionados y les están cobrando cupos para protegerlos. Para ‘chalequearlos’, como se dice en el argot popular. El sector microfinanciero está en las zonas más peligrosas, ahí están la cajas”, dijo Jorge Solis, presidente del gremio microfinanciero.
Precisó que la decisión, si bien está en evaluación por algunas entidades, alcanzaría a todos el país. “Solo en Lima las cajas tienen 250 agencias y si sumamos a las microfinancieras, llegamos a 300. La decisión de las entidades busca proteger a sus trabajadores. Hace unos meses estaban extorsionando a una caja en Ica y les pusieron un explosivo por no pagar cupo″, aseveró.
Solis también dio cuenta que, entre las entidades microfinancieras, resulta más frecuente que sus clientes cierren sus negocios por extorsión.
“Consideramos que el ministro del Interior sí debió ser censurado, ¿pero el Poder Ejecutivo y Legislativo tienen la moral para tirar la primera piedra? El Gobierno tiene una gran responsabilidad, pero también la tiene el Congreso y se necesitan medidas sumamente drásticas”, refirió.
