En Perú, la cerveza es más que una bebida; es un pilar de identidad y un motor de crecimiento para el país. No muchos productos tienen la responsabilidad y el orgullo de crear valor en toda su cadena, de la semilla a la botella, y recorrer de extremo a extremo el país, desde los pequeños productores agrícolas hasta el emprendedor y consumidor final. Sin embargo, el potencial de crecimiento de esta categoría es enorme y lo que hoy podemos ver y medir es solo la punta del iceberg.
La categoría cervecera genera más de 20 mil empleos directos e indirectos e impulsa la economía local impactando en miles agricultores, de proveedores locales y a más de 300.000 emprendedores bodegueros, donde la cerveza representa el 30% de sus ingresos. Además, la categoría en una de las principales contribuyentes del fisco, aportando más de S/4 mil millones en impuestos cada año.
Si la categoría crece, con ella lo hacen todos los que la hacen posible, pero, ¿cómo potenciar el impacto positivo de la industria?
Una de las principales tareas es promover el consumo responsable y dar a conocer las diversas ocasiones de consumo que existen para esta bebida tan versátil. La cerveza es un producto natural, local y accesible, una bebida de moderación que en el país se produce con altos estándares de calidad. Es también la compañera ideal para maridar con la diversa gastronomía peruana.
Un dato importante a considerar es que el consumo per cápita del Perú es de solo 44 litros (lt.)de cerveza, mientras que nuestro vecino de la región, Colombia, registra 55 lt. y México, 65 lt. Ello sin considerar países como Alemania, República Checa o Austria, donde el consumo per cápita es mayor a los 120 lt. Para que la categoría crezca (y con ella se potencie su impacto positivo) hay que migrar hacia nuevos comportamientos: promover un consumo menos intenso y más frecuente, fomentando la moderación. Esto, acompañado de alianzas y campañas que se adapten a las necesidades del consumidor a través de la innovación con nuevos formatos de envases y presentaciones, nuevas ocasiones de consumo, alternativas sin alcohol o nuevos sabores y variedades.
Recordemos que la cerveza es la primera red social del mundo. Antes de las plataformas digitales que conocemos, esta bebida ha unido a los amigos, colegas, familiares e incluso extraños en sus momentos para brindar más memorables. ¿Cómo no seguir construyendo sobre aquello que genera prosperidad y unión?
El crecimiento de la categoría no es solo una tarea de quienes formamos parte de ella, sino que requiere también de esfuerzos del ámbito público. La cerveza en el Perú tiene una de las cargas tributarias más altas de la región y las condiciones regulatorias limitan el crecimiento de muchos negocios de emprendedores. Con Backus hemos escrito 145 años de historia de una industria que apuesta por el Perú y su gente, y queremos mantenerla por al menos 145 años más. Trabajemos para que las oportunidades de hoy forjen el éxito y desarrollo del país por el que todos queremos brindar.
