Lunes, Diciembre 23

Este 9 de diciembre se conmemoró el Bicentenario de la Batalla de Ayacucho desde el santuario histórico de la Pampa de Ayacucho, en el distrito de la Quinua. Esta fecha marcó el fin del dominio español en América del Sur y consolidó la independencia de la región. El enfrentamiento, librado en las pampas de Ayacucho, no solo aseguró la libertad del Perú, sino también la de todo el continente.

Cabe resaltar que la presidenta Dina Boluarte no estuvo presente en la ceremonia de la Pampa de Ayacucho, hecho que fue criticado por el alcalde de la Municipalidad Distrital de La Quinua, Rúpert Límaco Avendaño.

Las tropas del ejército peruano, provenientes de Ayacucho, Lima y otras regiones del país, fueron formadas para la ocasión. También estuvieron presentes unidades de la Marina de Guerra y la Fuerza Aérea, así como efectivos de la Policía. La ceremonia comenzó a las 11:30, con la presencia de autoridades locales y escoltas internacionales de Argentina, Bolivia, Ecuador y Venezuela. Aunque se registraron lluvias y neblina que complicaron ligeramente la visibilidad, esto no fue impedimento para que la ceremonia se llevara a cabo.

También estuvieron presentes turistas nacionales y extranjeros, así como cerca de 1.000 soldados del Ejército Peruano, acompañados de estudiantes de diversas instituciones educativas de la región.

La ceremonia comenzó con la entonación del himno nacional del Perú. Luego, se realizó la acción litúrgica a cargo del arzobispo Salvador Piñeiro García Calderón. A continuación, se llevó a cabo el tradicional encendido de la llama por un cadete de la Escuela Militar de Chorrillos, seguido de la colocación de ofrendas florales en honor a los soldados que dieron su vida por la independencia del país. Asimismo, se guardó un minuto de silencio para honrar la memoria de los caídos.

También estuvo presente el alcalde del distrito de La Quinua, Rúpert Límaco Avendaño, quien dirigió unas palabras. Igualmente, participaron los altos mandos militares. Posteriormente, se llevó a cabo el desfile de honor y, finalmente, se realizó una escenificación de cómo se vivió la Batalla de Ayacucho.

Desarrollo de la ceremonia

El ministro de Defensa del Perú, Walter Enrique Astudillo Chávez, estuvo presente en el evento y dio inicio a la ceremonia. Además, se recibió al ministro de Relaciones Exteriores, Elmer José Germán Gonzalo Schialer Salcedo, y al ministro de Cultura, Fabricio Alfredo Valencia Gibaja.

Posteriormente al himno nacional, se dio inicio a la acción litúrgica a cargo de Salvador Piñeiro García Calderón. En el marco de esta celebración, invitó a todos a mantener un espíritu de compromiso para seguir construyendo juntos una patria fraterna y solidaria. “Debemos caminar unidos para mirar el pasado con gratitud, afrontar los retos del presente con pasión y abrazar el futuro con esperanza. Hay que construir una civilización de paz y prosperidad. Hagamos una patria de hermanos”, dijo.

Luego, se procedió al encendido de la llama votiva, una tradición que simboliza la victoria del Perú y rinde homenaje a quienes lucharon por consolidar la independencia. Después, se realizó el izamiento de las banderas de todos los países que participaron en la Batalla de Ayacucho: Argentina, Ecuador, Colombia, Chile, Venezuela, Uruguay, Paraguay e Inglaterra.

Después de la colocación de las ofrendas florales, a cargo de los ministros Walter Enrique Astudillo Chávez, Elmer José Germán Gonzalo Schialer Salcedo y Fabricio Alfredo Valencia Gibaja, quienes además revelaron la placa conmemorativa por el Bicentenario de la Batalla de Ayacucho, se dio paso al minuto de silencio para rendir homenaje a quienes lucharon en dicha batalla.

El alcalde de la Municipalidad Distrital de La Quinua, Rúpert Límaco Avendaño, brindó unas palabras. “Gracias a Dios por permitirnos llegar al Bicentenario de la Batalla de Ayacucho. Señores ministros, gobernadores regionales, alcaldes provinciales y distritales, delegaciones de países hermanos, autoridades eclesiásticas y personas que nos visitan, tengan muy buenos días y les doy la bienvenida al pueblo histórico de Quinua. Que este Bicentenario sea una oportunidad para construir el Perú que queremos y reconocer que nuestra diversidad es motivo de orgullo. Aún quedan muchas batallas que combatir, como la pobreza, la falta de empleo, el desarrollo tecnológico y el acceso libre y gratuito a la educación. Por eso, esta fecha debe ser una oportunidad para tomar acción y cerrar cada vez más las brechas sociales del país”, dijo.

Cuánto me hubiera gustado que nuestra presidenta, Dina Boluarte, estuviera presente en las pampas. Sin embargo, no ha sido posible, pero quiero que nuestros ministros lleven este mensaje: hay una deuda que saldar con Ayacucho. Necesitamos la pensión del Estado, no hemos recibido nada, especialmente el pueblo de Quinua. Le pido a la presidenta que priorice los proyectos de la región de Ayacucho. Que el 2025 sea la oportunidad para saldar cuentas con Ayacucho y así atender las necesidades de la población. También quiero pedir a la presidenta que esperábamos que el Bicentenario trajera desarrollo para nosotros, pero no hemos sido merecedores de nada. Por favor, estamos a tiempo, Quinua merece tener un centro de salud, más mercados, acceso a agua y desagüe, entre otros”, agregó.

Posteriormente, Orestes Martín Vargas Ortiz, Jefe de Estado Mayor General del Ejército, brindó un pronunciamiento. “El Perú ha recorrido 200 años llevando la victoria de Ayacucho en su memoria. Aquí, sobre estas tierras, se escribió con sangre uno de los capítulos más trascendentales de nuestra historia. Fue un largo proceso, no surgió de manera espontánea. Se dio un nuevo giro a la historia del Perú, América y el mundo. Fue un recorrido amplio que debemos mantener en la memoria de la sociedad”, sostuvo.

Posteriormente, el gobernador regional de Ayacucho, Wilfredo Oscorima Núñez, tomó la palabra. “Ayacucho se siente orgulloso y bendecido de ser la cuna de la libertad del Perú y de América. Aquí, en estas pampas, se selló la independencia. Aquí se dio el grito de la libertad. Sin embargo, con mucho dolor y tristeza para el pueblo de Ayacucho, esa libertad ha sido y sigue siendo a medias. No puede haber libertad mientras haya hambre, miseria ni injusticia. Han pasado 200 años y todavía, en este pueblo, mueren niñas y niños por falta de atención médica. Por ello, en nombre del pueblo de Ayacucho, pido al Ejecutivo, a nuestra señora presidenta, que escuche el reclamo de todos los ayacuchanos”, expresó.

Por su parte, el ministro de Defensa, Walter Enrique Astudillo Chávez, comunicó que “la historia es fundamental no solo para recordar a nuestros héroes, sino por las enseñanzas que nos puede brindar. Ahí radica la responsabilidad de todo buen ciudadano: saber interpretar esas enseñanzas y aplicarlas en su vida cotidiana. Quiero expresar el profundo pesar de la presidenta, quien, por razones de malas condiciones meteorológicas, no ha podido estar presente en esta ceremonia, pero está con nosotros de manera simultánea desde el Palacio de Gobierno”, precisó.

Luego, se llevó a cabo el desfile de honor de la Escuela Técnica Superior del Ejército Peruano, en el que participaron las distintas tropas de nuestro país, así como escoltas de países vecinos. Posteriormente, se realizó una escenificación de la Batalla de Ayacucho, en la que, con el acompañamiento de un narrador, tropas y estudiantes de colegios públicos y privados de Ayacucho simularon el enfrentamiento entre patriotas y las fuerzas españolas.

Ceremonia en simultáneo

Desde el Palacio de Gobierno, la presidenta de la República del Perú, Dina Boluarte, se pronunció con motivo de la ceremonia por el Bicentenario de la Batalla de Ayacucho. “Esta mañana, nuestro propósito era conmemorar los 200 años en las mismas pampas históricas, íbamos a reunirnos allí. Sin embargo, los caprichos del clima nos impidieron trasladarnos, pero ese contratiempo no apaga el fervor de la ceremonia. Nada puede impedir que conmemoremos este suceso que marcó nuestra historia y que rindamos homenaje a los héroes que dieron su vida por nosotros”, señaló.

Hoy conmemoramos una fecha que jamás pasará desapercibida. Demostró una amplia unidad de nuestro continente. En esta batalla, dijimos basta al sometimiento y a la opresión. Por ello, nuestro gobierno extiende sus manos y corazón para seguir construyendo un Perú libre y justo, protagonista de cambios. Somos una nación unida por la historia y la tradición. Sentimos orgullo por esta victoria que nos inspira”, añadió.

Oscorima fue abucheado

Cabe resaltar que, durante la serenata por el Bicentenario de la Batalla de Ayacucho, el gobernador regional de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, vivió un momento complicado al ser abucheado por el público presente mientras pronunciaba su discurso conmemorativo. En su intervención, Oscorima intentó resaltar la importancia histórica del bicentenario y subrayó su compromiso de celebrar este hito de manera destacada. Sin embargo, la multitud reaccionó con abucheos y gritos de desaprobación, utilizando calificativos ofensivos y dejando claro su descontento.

Este episodio refleja el creciente malestar hacia la gestión de Oscorima, quien, en las últimas semanas, ha enfrentado críticas y protestas por parte de diversos sectores de la región.

Compartir
Exit mobile version