Esta vez no fue un negocio ni una discoteca, sino un colegio. En pleno estado de emergencia, un sicario fingió ser un trabajador del Poder Judicial para pasar desapercibido y así asesinar a un profesor en el centro educativo Julio C. Tello, en Ate Vitarte.
Julio Pacheco Pimentel recibió tres impactos de bala en el pecho delante de sus alumnos. Su verdugo, un hombre que vestía polo blanco y chaleco azul, no emitió ninguna palabra, apretó el gatillo y luego huyó con rumbo desconocido.
Tras los hechos, el titular del Ministerio del Interior, Juan José Santiváñez, dijo que el caso se está investigando y aseguró que el estado de emergencia impuesto en 14 distritos de Lima está funcionando y tiene resultados frente a la criminalidad.
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Para defender la medida, brindó cifras: “El fin de semana ha habido más de 1000 detenidos, también hemos ingresado a los 68 penales del país, adicionalmente hemos capturado más de 3 organizaciones criminales. No podemos decir que, por un hecho que ha acontecido ahora, no existen más resultados”.
Juan José Santiváñez interrumpió las preguntas de los reporteros y se retiró con la excusa de que se iba a acercar al colegio Julio C. Tello, donde las clases fueron suspendidas por tres días mientras duran las pesquisas.
Quien también llegó al plantel educativo fue el ministro de Educación, Morgan Quero. Los padres de familia y profesores increparon al funcionario y le exigieron mayor seguridad en el distrito que parece consumido por la delincuencia. “No venga para la foto”, se le escuchó gritar a una de las madres.
