La NASA admitió este miércoles que hubo “tensión” durante las reuniones con ejecutivos de Boeing sobre cómo traer de regreso a la Tierra a dos astronautas varados en la Estación Espacial Internacional (EEI), aunque negó la versión de que hubo peleas a gritos.
MIRA: Varados en el espacio: riesgos y desafíos para astronautas que aún no pueden volver a la Tierra
La agencia espacial estadounidense acudió a la empresa SpaceX para rescatar a los astronautas debido a preocupaciones de seguridad relacionadas con la cápsula Starliner de Boeing, que sufrió fallas en los propulsores y fugas de helio en su camino hacia la EEI.
Butch Wilmore y Suni Williams partieron en junio para una misión cuya estadía sería de una semana, pero ahora se espera su vuelta no antes de febrero de 2025, cuando regrese la misión SpaceX Crew-9.
Boeing ha insistido públicamente en que confiaba en su nave espacial, pero la ausencia de sus ejecutivos en recientes conferencias de prensa de la NASA ha alimentado especulaciones de un quiebre en la relación.
El diario New York Post citó fuentes que afirmaban que las reuniones entre ambas partes con frecuencia terminaban en discusiones a gritos.
Steve Stich, director del programa de tripulación comercial de la NASA, dijo que “siempre que estás en una reunión de esta magnitud donde hay este tipo de decisiones, hay cierta tensión en la sala”.
“No diría que fue una reunión de gritos y alaridos”, declaró Stich a los periodistas. “Fue una discusión técnica tensa en la que ambas partes escucharon atentamente todos los datos”.
Pese a su prolongada estadía, Wilmore y Williams se mantienen de buen ánimo y están en contacto con sus familias. Ya no dependen de ropa prestada, pues les enviaron trajes durante una reciente misión de reabastecimiento, informó la NASA.
Está previsto que Starliner salga de la EEI el viernes por la noche, hora del este de Estados Unidos, para luego realizar un aterrizaje asistido por paracaídas en el oeste de Estados Unidos en las primeras horas del sábado.
Poco después de desacoplarse, la nave espacial ejecutará un “encendido de arranque” con sus propulsores para asegurarse de que se aleja de la estación y así continuar su viaje hacia la Tierra.