Tras no llegar a un acuerdo con las autoridades, los habitantes de Machu Picchu Pueblo y comunidades aledañas anunciaron la “radicalización” de la huelga indefinida que acatan en el Cusco protesta contra la implementación del nuevo sistema de venta de boletos de ingreso a la ciudadela inca de Machu Picchu.
A través de un comunicado, los manifestantes pidieron a la Dirección Desconcentrada de Cultura del Cusco a cerrar “por medidas de seguridad” la llacta de Machu Picchu mientras dure la huelga indefinida.
Incluso, consideraron que las agencias de turismo serían “irresponsables” si envían visitantes al distrito de Machu Picchu por la vía del acceso amazónico en plena medida de fuerza.
Reiteraron su pedido a la ministra de Cultura, Leslie Urteaga, de que deje sin efecto el contrato con la plataforma Joinnus, a cargo de la venta de boletos, para instalar inmediatamente la mesa técnica.
Los manifestantes, agrupados en el Colectivo Popular del distrito de Machu Picchu, indicaron que toman esta decisión debido a que no llegaron a un acuerdo con las autoridades, entre ellas el gobernador regional del Cusco, Werner Salcedo; ministro de Comercio Exterior y Turismo, Juan Carlos Mathews; ministra del Ambiente, Albina Ruiz; y la ministra de Cultura.